El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, sostuvo que la legalización de la producción de cannabis para uso medicinal e industrial «va a permitir desarrollar una industria nueva» y aseguró que la Argentina tiene las potencialidades necesarias para convertirse en «líder a nivel regional» en la materia. Lo más llamativo son los dato que brindó el ministro: “esta nueva industria podría generar, con 10.000 nuevos puestos de trabajo. Y sostuvo: estamos proyectando un escenario bastante conservador en el cual podemos empezar a exportar US$ 50 millones».
Si bien el proyecto de ley “Marco regulatorio para el desarrollo de la industria del cannabis medicinal y el cáñamo industrial” fue presentado hace un mes, establece los mecanismos para la regulación de la actividad, fomenta el desarrollo de la cadena productiva y, especialmente, promueve el desempeño de las cooperativas del sector y de las PyMEs.
“El mercado de cannabis medicinal y cáñamo industrial crece exponencialmente a nivel global, es una nueva fuente de empleo de calidad y desarrollo productivo”, afirmó Kulfas y ponderó la “gran oportunidad que tiene Argentina para ser líder regional, por sus capacidades agropecuarias e industriales y su entramado científico productivo”.
Además, puntualizó que “el proyecto crea las condiciones para el desarrollo de la cadena a nivel local, aprendiendo de las mejores lecciones internacionales”, y sostuvo que “el desarrollo de la cadena tendrá múltiples impactos positivos en el país: más empleo, más exportaciones, más innovación, desarrollo federal y acceso a la salud”.
“Hay más de 50 países que han avanzado en algún tipo de legalización para el cannabis de uso industrial medicinal e industrial. Esto está alentando un crecimiento exponencial de la producción. Una producción global proyectada para dentro de tres años en 42.700 millones de dólares, es decir, 14 veces más que hace diez años”, analizó el ministro y explicó que Israel, Canadá y Estados Unidos son líderes a nivel mundial; mientras que en la región se destacan Colombia y Uruguay”, sostuvo.
El potencial económico para el desarrollo de la actividad del cannabis medicinal y el cáñamo industrial para el año 2025 se proyecta en 10.000 nuevos empleos (alto porcentaje en I+D+i), US$ 500 millones en ventas al mercado interno anuales y US$ 50 millones de exportación anuales.
En declaraciones a Radio con Vos, Kulfas sostuvo que hay dos razones centrales para impulsar la utilización del cannabis y el cáñamo a nivel industrial.
En primer lugar, explicó que «es una actividad relativamente nueva que está creciendo mucho en el mundo. Hace 20 años la producción de cannabis para fines medicinales e industriales era prácticamente inexistente. Es una fuente importante para pensar nuevos trabajos y proyectos».
«En segundo lugar -continuó-, es necesario legalizar una producción de cannabis medicinal que está probado que es positiva, que parte de soluciones muy claras a personas con padecimientos. Hay que fabricarlo en la Argentina, en las mejores condiciones de trazabilidad y calidad», sostuvo el funcionario nacional.
En este sentido, enfatizó: «estoy convencido de que por esos dos motivos que esta ley va a permitir desarrollar una industria nueva, y ofrecer soluciones de salud para la gente que lo necesita».
En cuanto al cannabis medicinal, Kulfas explicó que el objetivo es el desarrollo de la cadena con uso medicinal y fisioterapéutico mediante un marco regulatorio para regularizar proyectos que hoy existen y poder complementar la ley 27.350; mientras que en relación al cáñamo, resaltó que el objetivo central es “permitir el desarrollo de esta industria, que es una variedad específica con baja concentración de THC no psicoactivo”.
En la actualidad el mercado de cannabis medicinal y cáñamo industrial está creciendo exponencialmente y será una fuente de empleo de calidad y desarrollo económico a nivel global.