En la previa del inicio del partido inaugural del Mundial entre Qatar y Ecuador este domingo, se produjeron escenas caóticas dentro y fuera del «fan fest» en el parque Al Bidda de Doha, después de que los organizadores permitieran que demasiados aficionados inundaran el recinto.
El lugar tiene un aforo para 40.000 personas, pero al menos el doble de gente intentó entrar y durante mucho tiempo se dejó pasar a muchos a una zona de espera entre el parque principal del festival y la entrada del perímetro.
La policía se dio cuenta del problema y tuvo que sacar a los furiosos seguidores del recinto.
«Era peligroso», dijo un aficionado que llevaba en brazos a un niño de casi cuatro años y que había salido de la zona de espera. «Dejaron entrar a demasiada gente. No llegamos a entrar en la zona principal y por suerte pude salir».
Finalmente, las fuerza policiales tardaron aproximadamente unos 45 minutos en desalojar de la zona al exceso de aficionados.