El ministro de Economía, Luis Caputo, sostuvo que «la dolarización y el cierre del Banco Central siguen siendo banderas de este gobierno», pero advirtió que antes se debe «salir de esta catástrofe», y anticipó que se está «trabajando en el decreto de desregulación».
En declaraciones al canal LN+, Caputo indicó que «el objetivo sigue siendo el mismo y es llegar a la dolarización, pero hay que salir de esta catástrofe, por eso es tan importante llegar a déficit cero».
«El corazón del programa siempre fue fiscal. El ancla es fiscal, como Tesoro no le vamos a pedir más financiamiento al BCRA. Garantizamos la independencia del BCRA y el esquema es fiscal, cambiario y monetario», explicó el jefe del Palacio de Hacienda.
«Estamos en una catástrofe porque, si medimos la inflación de los últimos quince días, estamos en una tasa superior al 3.700% anual», afirmó Caputo.
El ministro subrayó que «la inflación está subiendo al 1% diario», y aseguró que «la gente tiene más conciencia de la crisis porque la inflación es la consecuencia de las políticas pasadas».
«Estamos en una especie de ilusión monetaria, donde le hacen creer a la gente que compran más, pero la gente se da cuenta que compra menos», enfatizó.
El ministro defendió la fase de estabilización al señalar que «el 80% de la reducción del gasto es a la política», si se toma en cuenta que «los subsidios son el 40% del déficit».
«El déficit (fiscal) genera inflación y por eso implementamos un plan creíble de déficit cero. Este es un plan ortodoxo clásico», precisó.
«Desde hace 70 años la política viene engañando a la gente, por eso lo que hacemos es decirle la verdad a la población. No tengan dudas que el sacrificio va a rendir frutos», resaltó.
Respecto a la deuda con los importadores, el responsable de la cartera económica apuntó: «Estamos en un esquema de solucionar la deuda comercial. Esta es una deuda por la cual el BCRA le tenía que dar los dólares a los importadores, pero que el BCRA no tenía. Decir que estatizamos la deuda de los importadores es una chicana».
Por otra parte, el ministro descartó una nueva modificación del tipo de cambio en el corto plazo: «No, de ninguna manera, no va a haber una nueva devaluación».
Caputo sostuvo, además, que «la discusión por la modificación del impuesto a las ganancias es un pedido de los gobernadores y esa discusión es política».
El funcionario descartó que se vaya a coparticipar el impuesto al cheque y dijo que «las provincias están en equilibrio financiero. De los 39 puntos del PBI que representa el gasto público, 19 puntos corresponden a la Nación y 20 puntos son de las provincias y los municipios. Así es muy fácil estar en equilibrio cuando la Nación te transfiere los recursos».
En otro orden, Caputo defendió la propuesta de nueva fórmula de movilidad jubilatoria que se va a enviar al Congreso Nacional para mejorar el ingreso del sector pasivo.
«La nueva fórmula de movilidad previsional es para mejorar los ingresos de los jubilados. Si no cambiábamos la fórmula actual, los jubilados seguían perdiendo poder de compra frente a la inflación. Con la fórmula actual, los jubilados han perdido 23% este año».
El jefe del Palacio de Hacienda aseguró que cuando el Congreso apruebe la ley con la nueva fórmula de movilidad, habrá mejoras para los jubilados. «No podemos descuidar a los más vulnerables», sostuvo.
«Por el momento no habrá cambios en los regímenes promocionales. Personalmente, estoy en contra de los regímenes promocionales pero hay que darle tiempo para que esos sectores se reconviertan porque no se pueden cortar de un día para el otro», resumió el ministro algunos puntos de la política económica.
También descartó que el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Administración Nacional de la Seguridad Social vaya a vender las acciones que posee un cartera de inversiones y afirmó que «sólo se tomarán créditos de organismos internacionales para recomponer las reservas del BCRA».
Ojo con la reacción social
La calificadora Moody’s consideró que las medidas económicas que anunció el gobierno constituyen “un primer paso firme para abordar los desequilibrios macroeconómicos” de la Argentina.
Sin embargo, advirtió que la “reacción social que podría esperarse limitará el margen de maniobra” del Poder Ejecutivo para aplicarlas.
“Las medidas recientemente anunciadas por el gobierno de (Javier) Milei, que apuntan a reducir el déficit fiscal en un 5,2% del PBI y devaluar el tipo de cambio oficial un 100%, constituyen un primer paso firme para abordar los desequilibrios macroeconómicos de Argentina. Este enfoque se aleja fuertemente del gradualismo aplicado en el pasado”, sostuvo este jueves el analista responsable de las calificaciones crediticias del gobierno argentino, Jaime Reusche.
Según el directivo, las medidas que difundió el ministro de Economía, Luis Caputo, “podrían generar una contracción que lleve a una situación en la cual las condiciones económicas generales se deterioren notablemente antes de que empiecen a mejorar”.
“La reacción social que podría esperarse limitará el margen de maniobra del gobierno, lo que pondrá a prueba la voluntad y capacidad de las autoridades de seguir aplicando medidas contundentes”, enfatizó.
Para Reusche, la capacidad del gobierno de “continuar por la senda del ajuste, una tarea difícil en sí misma, determinará si el perfil crediticio de la Argentina puede mejorar en el largo plazo”.