El arquero de Rosario Central Mauricio Caranta sostuvo ayer que las “alegrías duran poco”, a propósito del reciente ascenso del equipo canalla a primera división, y que más allá de que es “muy lindo sentir el reconocimiento de la gente, ahora viene la etapa más difícil, que es la de mantenerse”.
“Las alegrías duran poco. Es muy lindo sentir el reconocimiento de la gente, pero ahora viene la etapa más difícil, que es la de mantenerse”, reconoció el arquero cordobés.
“No fue fácil para mí la adaptación durante el primer semestre de la temporada, porque arrancamos mal. Si en vez de Miguel Russo hubiese estado otro entrenador, no lo habrían aguantado”, admitió el ex jugador de lanas.
Caranta manifestó que en toda su carrera nunca vio “una ciudad en la que se vive el fútbol con tanta pasión como en Rosario. Por eso al próximo clásico con Newell’s será para disfrutarlo”.
“Pero no nos tendría que ocupar el tema de la violencia. No hay que instalarlo. Ojalá cuando nos volvamos a enfrentar pueda haber público visitante y se viva ese clásico como corresponde”, se ilusionó.
“Hay que romper con eso de darle pocas entradas a los visitantes y también con que cien hinchas provoquen incidentes para que termine un partido”, advirtió.
El ex arquero de Instituto (Córdoba), Santos Laguna (México) y Boca afirmó que la gente “promueve la violencia desde el principio. Es terrible ver a un nene de cinco años insultando a los jugadores al lado de su padre”.
“Sin ir más lejos el otro día estuve viendo por televisión el caso de Fabián Vargas y creo que no fue a Racing por miedo. Pero los que hoy minimizan las amenazas que recibió de parte de la gente de Independiente, son los mismos que hace dos semanas le vienen dando manija al tema”, cuestionó.
“Para un futbolista que tiene una familia detrás, no todo es igual. No es lo mismo ser titular que suplente. La exposición siempre es complicada. No es fácil estar del lado del jugador”, analizó.
Respecto del clásico rival, Newell’s, y puntualmente de su ya ex entrenador, Gerardo Martino, bajo cuyas órdenes estuvo en Instituto, el cordobés no compartió las quejas del Tata respecto del fútbol argentino.
“Martino se quejó de que la Súperfinal era innecesaria, pero nadie levantó la voz cuando ésta se organizó a principios de temporada. Uno está dentro del fútbol y debe adaptarse a las reglas. Lo que pasa es que en los finales de temporada todos quieren cambiar, aunque al principio no dijeron nada”, puntualizó.
“Y en cuanto a lo futbolístico, yo estoy identificado con el sistema de juego de éste Central. Lo que pasa es que los arqueros ahora tenemos que adaptarnos más que antes a ellos”, refirió.
Al borde de los 35 años, Caranta apreció que en la actualidad el arquero “superó todo lo que se hacía antes en el puesto. Ahora debe tener condiciones técnicas y participar en el circuito de juego, algo que debe entrenar más que lo físico”.
“Cuando estuve con Martino en Instituto, ese equipo jugaba de la misma manera que ahora lo hace Newell’s, y por eso estaba obligado a manejarme más con los pies. Algo parecido a lo de Nahuel Guzmán en este momento”, deslizó el arquero.
Finalmente, Caranta aseguró no tener “problemas en hablar de la etapa vivida en Boca, pero de la actualidad no corresponde opinar, porque para eso hay que estar adentro”.
“Muchos me preguntan por (Juan Román) Riquelme, pero aunque conviví dos años con él, sólo lo hice en el vestuario, así que no tengo una opinión definida sobre como es”, completó el arquero que acaba de perder un millonario juicio con la entidad de la Ribera, debido a su conflictiva salida del Xeneize.
