La Multisectorial por los Humedales cambió nuevamente su modalidad de protesta pero no sus reclamos: por la sanción de la ley de Humedales y el fin de las quema y el ecocidio convocó esta vez a la plaza López, histórico escenario de manifestaciones de trabajadores en las primeras décadas del siglo pasado, que se convirtió este sábado en un faro iluminando el ocaso. Desde allí partió una columna de manifestantes, con una carroza con animales del Humedal y tambores al frente, con antorchas y malabaristas que hacían acrobacias con teas encendidas. Era la “Caravana del Fuego”, una movilización que a paso lento recorría avenida Pellegrini hasta bulevar Oroño (a las 22.30 recién estaban pasando Tribunales y la desconcentración se demoró hasta pasada la medianoche), para retornar por Córdoba hasta la plaza San Martín, frente a la sede de Gobernación. “Nuestra lucha no se apaga. Somos las semillas que brotan del fuego”, fue la consigna eje para la primera de cuatro concentraciones. Las tres que seguirán tendrán cada una su elemento, tierra, agua y aire, como centro de atención. La movida responde a la flamante convergencia de los activistas locales con otras organizaciones hermanas, con las que se acaba de conformar la Renahu, la Red Nacional de Humedales.
La marcha se inició cerca de las 20, cuando ya estaba oscurecido el cielo, haciendo más visibles las antorchas y la puesta en escena de la Multisectorial. Más de una cuadra de personas ocuparon una de las manos de Pellegrini para iniciar la caminata hacia el oeste, cuidando la distancia social, como subraya en cada convocatoria la organización.
A la convocatoria se sumaron otras organizaciones, y algunas de ellas suelen participar de los cortes en el puente Rosario-Victoria y en otras actividades de protesta, e incluso convocan a las suyas propias. El Paraná No Se Toca, Autoconvocadxs por los Humedales, XR Argentina (la internacional Rebelión o Extinción) se alternaban con otras entidades como el taller STS Rosario, la reserva Mundo Aparte, la agrupación universitaria Tupac, la Red Ecosocialista, y el recién parido espacio «Sindicatos por el Ambiente», una comisión especial de gremios que empezaron a articular sus secretarías o áreas internas dedicadas al medioambiente en una intersindical. Ley de Humedales ya! es el título del primer manifiesto del espacio, que entre otros conformaron el Sindicato de Prensa Rosario, el Sindicato de Trabajadores Municipales, Coad (Docentes Universitarios), Siprus (Profesionales de la Salud), el Sindicato de Jaboneros de Rosario y Villa Gobernador Gálvez, el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (Soear), La Bancaria, Amsafé Rosario y ATE Rosario.
En el documento, los distintos gremios no sólo abordan las quemas en el Humedal, sino que se pronuncian sobre temas ambientales desde el ámbito laboral. En esa línea reclaman «iniciar una transición hacia nuevas formas de producción, distribución, consumo y acceso» a bienes, cuestionando el extractivismo de la minería a cielo abierto, la agricultura industrial, el fracking, entre otros, y sentando posición en favor de la minería a pequeña escala y con control social, la producción agroecológica, el desarrollo y uso de energías renovables. «La pandemia que azota a la humanidad hoy –advierten– pone en evidencia los modos desastrosos de relacionamiento que impone el actual sistema de producción mundial imperante». Y concluyen: “Los sindicatos que suscribimos el presente documento, como organizaciones fundamentales de la sociedad civil, decidimos no quedarnos ajenos a la degradación del medio ambiente y al ecocidio que ponen en severo riesgo las posibilidades de sostener una vida en común”.
La movilización dio comienzo, también, a la Semana de los Humedales, la presentación en sociedad de la Renahu, en la que se desplegarán actividades a nivel local en cada lugar donde se haya constituido una organización, y actividades conjuntas que serán transmitidas en directo desde distintos puntos para todos los puntos de la Red: están previstas conferencias de científicas y científicos hasta artistas y dirigentes políticos y sociales que abordarán el grave daño causado a lo largo de la cuenca del Paraná, en las serranías de Córdoba, en la Patagonia y en otros áreas del país donde ecorregiones que ya estaban en estado crítico ahora son cenizas. En la programación intensiva con “vivos” a través de los distintos canales de comunicación de las organizaciones ya está prevista para este domingo a las 19 la presentación de Mare, advertencia lírica, una cantante mexicana. Y le seguirán a lo largo de la semana científicos como la bióloga e investigadora Natalia Morandeira, de la Universidad Nacional de San Martín, en provincia de Buenos Aires, una de las denunciantes en la Justicia federal de Paraná de los intentos de cambios de uso del suelo en el Delta. Así se identificó en puntos de las islas de las Lechiguanas que donde había arroyos, espejos de agua, selva en galería y otras características del paisaje del Humedal, después de grandes quemas quedaban endicamientos y maquinaria rural, entre ella equipos no ya de preparación del suelo para cultivo o ganado sino de fumigación con agroquímicos.