El basquetbolista santafesino Carlos “Lancha” Delfino y su padre acordaron con la Fiscalía federal suspender un juicio oral en su contra por lavado de activos en el que estaban procesados. En su lugar pagarán una multa millonaria y realizarán una importante donación al hospital de Santo Tomé.
Para concretar la “suspensión del juicio a prueba” ambos acusados comprarán un equipo de Rayos X y un utilitario cero kilómetro que serán donados al centro de salud, elementos valuados en 60 mil dólares, y pagarán cerca de dos millones y medio de pesos de multa, informaron voceros del caso. A ese acuerdo llegaron luego de varias negociaciones con la Fiscalía, que antes de aceptarlo ya había rechazado otras propuestas presentadas por el abogado defensor del deportista y su padre.
Una vez redactado el acuerdo, el Tribunal Oral de Santa Fe suspendió el proceso a ambos imputados por dos años, tiempo en el que deben cumplir con lo pautado, en una resolución firmada por el juez subrogante Germán Sutter Schneider.
Para ello, el magistrado debió atenuar la imputación penal que pesaba sobre el padre del Lancha, ya que tenía un agravante que en caso de condena elevaría la pena prevista entre 3 y 10 años de prisión a un monto que no permite aplicar el beneficio de la suspensión del juicio a prueba.
Si bien el juez Sutter Schneider consideró la “gravedad y especiales características” de los delitos que les endilgaron, consideró que el acuerdo alcanzado era “razonable”.
Según sus argumentos, en el caso del basquetbolista fue procedente concederle el beneficio porque tenía “la expresa y fundada conformidad” del fiscal Suárez Faisal, la pena en expectativa del delito que se le atribuye podría ser dejada en suspenso, ofreció pagar la multa y carece de antecedentes penales.
No obstante, en el caso de su padre, según la investigación del fiscal federal Walter Rodríguez, la responsabilidad en los delitos eran de mayor gravedad y “se tornaría improcedente la suspensión del juicio a prueba”, expresó el juez.
No obstante, el Sutter Schneider remarcó que durante el curso de la audiencia, el fiscal general Suárez Faisal se pronunció a favor del pedido de la defensa y aceptó atenuar la acusación en su contra, lo que el para el juez fue un “factor relevante” que determinó su decisión.
Además de las donaciones y la multa, el juez impuso una serie de reglas de conducta de rigor, entre ellas que fijen domicilio de residencia y no lo modifiquen sin previa autorización.
La causa
La investigación por la que fueron procesados el ex integrante de la Generacion Dorada de la selección argentina Lancha Delfino y su padre estuvo a cargo del fiscal federal N° 2 de Santa Fe, Walter Rodríguez. Los acusó de lavar dinero del narcotráfico en la localidad santafesina de Santo Tomé.
Lancha fue procesado por venderle una propiedad en el country El Paso a Vicente Pignata, un sindicado narco que continúa prófugo de la Justicia con dos pedidos de captura activos y una recompensa de medio millón de pesos por su cabeza. El fiscal Rodríguez también procesó a su padre Carlos Gustavo Delfino, y a la esposa del mencionado traficante, Elisabet Yanina Campos.
Según el requerimiento de elevación a juicio, Lancha Delfino y su padre le facilitaron los medios al narco prófugo Pignata y a su esposa para que laven dinero con fondos presuntamente provenientes del narcotráfico.
El caso salió a la luz en marzo de 2019 cuando la Policía Federal Argentina (PFA) realizó cinco allanamientos en busca de Pignata en Santa Fe, Santo Tomé y un campo en la localidad mendocina de Bowen. A pignata no lo encontraron aún pero en esa oportunidad detuvieron a su suegro, Ramón Darío Campos, acusado en la causa como presta nombre.
En tanto su hija está sindicada de haber puesto en circulación activos originados en el narcotráfico para que adquieran apariencia lícita. Según el fiscal, el dinero de la droga lo preveía Pignata antes de ser condenado en marzo de 2017 por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización por la Justicia federal de Santa Fe.
Por su parte, los bienes en los que se invirtió el dinero entre 2011 y 2019 mediante distintas operaciones comerciales, según la acusación fiscal, son 13 vehículos y siete propiedades, entre ellas la Unidad Funcional N° 343 del country El Paso ubicado en el kilómetro 153 de la autopista Rosario-Santa Fe que pertenecía a Delfino. Dicha propiedad se encontraba a nombre de una off shore llamada Parmery Trading SA radicada en la ciudad uruguaya de Montevideo y cuyo titular, paradójicamente, era Delfino (padre).
Piden elevar a juicio la causa federal que investiga a Carlos «Lancha» Delfino