¿Se reserva Elisa Carrió, igual que Julio Cobos, para las internas del 14 de agosto? ¿Está dispuesta a bajar su candidatura presidencial si Ricardo Alfonsín encabeza junto a Hermes Binner ese frente opositor? Una batería de interrogantes volvió a envolver el futuro de la dirigente opositora más votada en las últimas elecciones presidenciales.
La diputada fue la encargada de instalar este cambio de escenario que podría modificar el mapa opositor de cara a las elecciones presidenciales del 23 de octubre, e incluso de una eventual segunda vuelta.
Candidata única, la jefa de la Coalición Cívica sorprendió esta semana al advertir: “Habrá que ver cómo queda ordenado el radicalismo para ver si podemos confluir”.
Enemiga íntima de Cobos, ahora Lilita espera una depuración natural de la UCR a partir de la interna anticipada que el centenario partido realizará el 30 de abril sin la participación del vicepresidente.
Carrió tendrá dos posibilidades para evitar la dispersión del voto panradical y favorecer las chances del kirchnerismo y también de Mauricio Macri en las presidenciales de octubre. La diputada podría reflotar el fenecido Acuerdo Cívico y Social, espacio que compartió con radicales, socialistas y el GEN de Margarita Stolbizer en las elecciones legislativas de 2009, para participar de las internas abiertas, simultáneas y obligatorias previstas por ley para el segundo domingo de agosto. Debería enfrentar en ese turno al ganador de la previa entre Ricardo Alfonsín y Ernesto Sanz y, eventualmente, también a Cobos.
Pero la frase de Carrió sobre un eventual acuerdo con la UCR también dejó abierta la posibilidad de deponer su candidatura presidencial para sumarse a ese armado como jefa de Gobierno de la Capital Federal, instancia en la que debería enfrentar a su amiga Gabriela Michetti o acomodarse eventualmente como futura jefa de gabinete de un gobierno alfonsinista. Esa aproximación con el radicalismo se refleja también en Santa Fe, donde el precandidato a gobernador de la Coalición Cívica, el diputado Carlos Comi, suma cada vez más coincidencias con el intendente de la capital provincial y precandidato radical, Mario Barletta. Tanto que ya se habla de una fórmula compartida para enfrentar a Rubén Giustiniani y a Antonio Bonfatti en internas.
“Es una gran satisfacción seguir trabajando con Carlos Comi, porque tenemos una importante coincidencia en términos de la necesidad de llevar adelante todos los diálogos que hagan posible la consolidación del Frente Progresista. Pero además, existe entre nuestros equipos una gran afinidad y hay fuertes coincidencias en nuestras propuestas”, señaló Barletta en declaraciones a la prensa. En esa línea, el actual intendente de Santa Fe y ex rector de la UNL recordó que en diciembre pasado la UCR y el ARI firmaron un acuerdo programático de 15 puntos de cara a las elecciones de este año.