La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, consideró que el fiscal Alberto Nisman fue víctima de «un suicidio inducido o un asesinato», al tiempo que denunció «una guerra de los servicios y por la verdad del poder». «Esto fue un suicidio inducido o un asesinato», dijo Carrió, quien señaló que «esto era previsible», al tiempo que dijo «en los últimos 20 años ha muerto mucha gente de esta manera, sobre todo en la época de (Carlos) Menem». Carrió sostuvo que «esta es una guerra de los sótanos del poder terrible» y advirtió que «el poder no quiere que se sepa la verdad», aunque dijo que su intención es «llevar tranquilidad». En declaraciones televisivas, la legisladora adelantó que no concurrirá al Congreso a la reunión de la Comisión de Legislación Penal de Diputados convocada para esta tarde ya que no quiere, según dijo, «hacer de esto un uso político» Para Carrió, «este hombre quedó solo» en medio de «una guerra de servicios», al opinar sobre la muerte de Nisman conocida esta mañana. «Esta muerte es una muerte muy grave en términos de saber si pudo entregar la documentación» que respaldaba la denuncia que realizó Nisman contra la presidenta Cristina Kirchner y el canciller Héctor Timerman, indicó Carrió. La dirigente opositora insistió en que «vamos a la República o caemos en el narcoestado o la mafia definitivamente» y señaló: «esto va a hacer a la sociedad que no exagero pero quiero que todos estén calmos». «En enero había que estar acá, no es gratis la pelea que desató la presidenta en enero y todos estaban juntos antes Cristina (Kirchner), Nestor (Kirchner), (el exespía Antonio Stiuso». En cuanto a la denuncia de Nisman, consideró que es «absolutamente razonable» ya que muestra «los sótanos del poder mundial».
