El ex ministro de Economía Domingo Cavallo elogió una decisión del gobierno vinculada con el mercado de cambios y resaltó que se trata de una «medida inteligente».
Desde el 1º de octubre, las empresas y las personas pueden ingresar capitales y financiamiento externo a través del dólar contado con liquidación, una operación que estaba «virtualmente prohibida porque quien la hiciera, quedaba imposibilitado de operar en el mercado único y libre de cambios que no es ni único ni libre», dijo el economista.
«Entre tantos desaciertos, al menos una medida inteligente», destacó Cavallo en su blog personal, y consideró que si esta medida «es el comienzo de un desdoblamiento formal del mercado cambiario, con un mercado comercial que seguiría, transitoriamente, sujeto a control de cambios y un segmento totalmente libre, que podría denominarse financiero, la economía podría avanzar en forma no traumática hacia una reunificación y liberalización total del mercado cambiario».
A su criterio, «la clave para la reunificación y liberalización no traumática es que la cotización del dólar en el mercado financiero, inicialmente muy alejada de la cotización en el mercado comercial, se acerque a la de este último».
«Para ello la cotización en el mercado comercial debería ser fijada por el Banco Central de tal manera que no se atrase con respecto a la inflación y, en lo posible, suba un poco más que la tasa de inflación. La cotización en el mercado financiero tendería a estabilizarse o incluso podría descender, porque muchas empresas encontrarán conveniente ingresar capitales o financiarse desde el exterior atraídos por la menor expectativa de devaluación en el mercado libre una vez que quede claro que el objetivo es lograr la reunificación y liberalización completa», explicó.
El ex ministro señaló además que «cuanto antes», deberían disponerse otras medidas, como «habilitar el funcionamiento de un mercado financiero libre sin necesidad de que las operaciones se hagan a través de la compraventa de bonos» y también «establecerse que operaciones de venta de dólares deberían canalizarse obligatoriamente por el mercado comercial y para que compras de dólares estaría abierto ese mercado».
«Mi sugerencia es que todas las exportaciones de bienes, así como las importaciones de bienes y los servicios relacionadas con ellas deberían canalizarse por el mercado comercial. También deberían salir por ese mercado todos los pagos de deudas por importaciones de pagos diferidos. Todo otro tipo de oferta o demanda de dólares, incluidas las exportaciones e importaciones de servicios, deberían derivarse al mercado financiero libre», puntualizó.
Según Cavallo, el achicamiento de la brecha cambiaria «no será otra cosa que el realineamiento del tipo de cambio hacia un nivel único y sostenible en el tiempo. Recién allí se podrá hablar de un tipo de cambio de mercado en equilibrio de corto plazo, con la posibilidad de ser de equilibrio de largo plazo una vez abierta la economía y consolidada la situación fiscal, requisitos indispensables para hacer sostenible un plan de estabilización».