Con siete fechas disputadas, la campaña de Central es matemáticamente irreprochable. El Canalla cosechó 17 puntos sobre 21 en juego, y es uno de los protagonistas del torneo. Y ese, uno de los objetivos planteados por el cuerpo técnico y el plantel, se está cumpliendo.
Pero hay un escenario que, a esta altura del campeonato, está lejos del que imaginaba Coudet. Es que el Chacho contaba, y en su momento hasta lo declaró, que después de las primeras cinco jornadas del campeonato, tendría a todo el plantel “nivelado y a disposición”. Y, en ese punto, la realidad es muy diferente.
Ya sea por problemas físicos que acarreaban desde la temporada pasada, como por lesiones que se generaron en estos meses de trabajo, o también por situaciones especiales, Coudet no puede contar con cinco jugadores. Los que componen el grupo son los lesionados Pablo Álvarez (ruptura fibrilar en el sóleo derecho), Gustavo Colman (desgarro aductor izquierdo), y Damián Musto (edema en el sóleo derecho). Además de los mencionados, todos titulares en el once ideal de Coudet, aparecen otros dos casos: Tomás Berra (operado hace un par de semanas de un problema inguinal), y Pablo Becker (hernia lumbar). Estos jugadores aparecían como hombres de recambio en la idea futbolística del Chacho. Y no pudo contar con ninguno de ellos en lo que va del torneo.
Todas estas bajas, sumado a la situación física de otros jugadores que aún no están “en ritmo”, dejaron expuesto que el plantel conformado para afrontar el torneo es “corto”. Al menos, para apuntalar la pretensión de ser protagonista hasta el final de un torneo de 30 fechas, hoy faltan recambios de mayor experiencia.
Álvarez no juega desde la quinta fecha, y Coudet aún no pudo resolver su ausencia que, sin dudas, resintió la solidez defensiva que venía mostrando el equipo. Mientras que en la gestación de juego, se extrañó el efecto Colman. El ex Chacarita le inyectó fútbol al equipo en varios segundos tiempos. Y eso brilló por su ausencia en los últimos dos partidos.
Pero el concepto de “plantel corto”, queda avalado también en los números. Es que para reemplazar a los ausentes, Coudet tuvo que apostar por futbolistas jóvenes, la mayoría de ellos, con pocos juegos en primera división. En ese lote aparecen: Elías Gómez (15 partidos), Maximiliano González (2 partidos), Walter Montoya (12 partidos) y Hernán Da Campo (3 partidos).
Además, Yeimar Gómez Andrade y Franco Cervi, que jugaron como titulares todos los partidos de este torneo, están haciendo su primera experiencia en la máxima categoría. El colombiano suma 13 juegos en el círculo mayor; mientras que Cervi llegó recién a los 10.
Lejos de poner excusas por esta situación, Coudet apunta a seguir trabajando para resolver los problemas que se presentan. La tarea no asoma sencilla. Pero, respaldado por la buena cantidad de puntos sumada por el equipo en este arranque de torneo, el Chacho cuenta hoy con una importante cuota de oxígeno como para buscar variantes en un marco de tranquilidad. En este sentido, será fundamental el recuperar algunas piezas, y poner a punto otras.
Con los refuerzos en la mira
La intención de este material periodístico está muy lejos del cuestionamiento de la jerarquía de la mayoría de las contrataciones en el último libro de pases. Pero en su momento, El Hincha abrió interrogantes sobre la respuesta que podían dar en el corto plazo los futbolistas que arrastraban una marcada falta de continuidad. Y la respuesta aparece hoy en cada formación titular que arma Coudet. En la última, ante Coplón, sólo hubo en cancha tres refuerzos: Villagra, Fernández y Ruben. Del resto, dos estuvieron en el banco (Ferrari y Delgado), y no ingresaron; y los dos restantes (Álvarez y Colman) se encuentran lesionados.
De los siete refuerzos que se contrataron en el último libro de pases, sólo uno jugó todos los encuentros del torneo. Ese fue Ruben. Aunque cabe puntualizar en este punto que tanto Villagra como Fernández, sólo se perdieron partidos por cuestiones administrativas o disciplinarias.
Así, Villagra estuvo en cancha desde que fue habilitado, en la cuarta fecha ante Olimpo. Mientras que Fernández, de bajas producciones en sus últimas presentaciones, sólo faltó en la visita a Atlético Rafaela debido a que estaba suspendido.
De los otros cuatro jugadores que arribaron al club para reforzar el plantel, hay tres que no lograron aún la plenitud física. Dos de ellos arrastraban una importante inactividad: Pablo Álvarez y Gustavo Colman. Y ambos se reponen actualmente de lesiones musculares.
El restante es César Delgado. El Chelito llevaba un período de poca continuidad de juego en Monterrey de México. Y todavía no encontró el ritmo futbolístico que le permita ganarse un lugar entre los once.
El cuarto de este grupo es Jonathan Ferrari, quien sufrió una lesión traumática (NdR. esguince de rodilla leve) un par de semanas antes del inicio del torneo. Eso le impidió a Ferrari pelear por la titularidad en igualdad de condiciones con el resto, y lo postergó al banco. En la única chance que tuvo hasta el momento, ante Atlético Rafaela y como lateral derecho, Ferrari decepcionó.