En la víspera del partido entre Rosario Central y Argentino Juniors, tres barras alcoholizados golpearon a Hernán Brest, funcionario de la Subsecretaría de Prevención, quien sufrió una lesión en el rostro y un corte en la mano.
Durante la ronda de inspecciones al dispositivo de seguridad desplegado en el entorno de Gigante de Arroyito, tres personas alcoholizadas intentaron ingresar por la fuerza al estadio. En ese instante los funcionarios de la Subsecretaría de Seguridad Preventiva a cargo de la supervisión de los puestos de control, fueron interpelados y abruptamente agredidos a golpes de puño y con botellas.
Al grito de «aguante los Guerreros», los violentos intentaron escapar pero fueron retenidos por el mismo personal que recibió las agresiones.
«Cobardes barrabravas agredieron a dos de los funcionarios Ministerio de Seguridad. Les impondremos derecho de admisión por 10 años. Espero que el fiscal de flagrancia actúe con la severidad que amerita este agravio contra funcionarios públicos. Los violentos no quieren entender que el único orden justo es el de la ley. Se los haremos entender», declaró Diego Llumá, Subsecretario de Seguridad Preventiva. Momentos antes, la policía de la provincia detuvo a otro miembro de la barra que intentaba llevar pirotecnia para ser utilizada desde la terraza de un edificio lindero.