Jesús Méndez podría seguir formando parte del plantel de Rosario Central. Así se lo hizo saber una alta fuente dirigencial de la entidad de Arroyito a este diario. Es que ayer hubo un contacto positivo con José Beraldi, uno de los vicepresidentes de Boca, club dueño del pase del volante.
Mientras tanto, de vuelta de Chile, Juan Antonio Pizzi se reunió anoche con Gonzalo Belloso en Capital Federal y le comunicó la posibilidad de sumar a dos futbolistas que dirigió en su paso por la Universidad Católica. Se trata del defensor trasandino David Henríquez y del delantero argentino Pablo Calandria.
Según pudo averiguar El Hincha, los canallas tendrán prioridad para conseguir los servicios de Méndez, por quien se gestionará un préstamo de un año de duración. Pero uno de los puntos más importantes de la negociación es que la posible llegada del mediocampista no involucra la salida de Jorge Broun. Y la permanencia del arquero en el club fue una de las prioridades planteadas por Juan Pizzi.
Así, quedó de lado la posibilidad de intercambiar porcentajes de los pases de Méndez y Broun entre los clubes, algo que Central y Boca practicaron en el pasado cercano, cuando negociaron las transferencias de Damián Díaz y Andrés Franzoia.
Los canallas empezarán a darle forma a la contratación en las próximas horas, sabiendo que Méndez es también pretendido por otros equipos de primera división, como Unión de Santa Fe; o del exterior, como Barcelona de Ecuador, club en el que dirige el argentino Luis Zubeldía.
Dos de la Católica en la mira
Trascendió ayer que Juan Antonio Pizzi habló en Santiago de Chile por dos jugadores que dirigió en la Universidad Católica. Se trata del experimentado defensor David Henríquez y del delantero Pablo Calandria.
Lo de Henríquez, a punto de cumplir 34 años, parece bastante complicado. En cambio, la chance de conseguir los servicios de Calandria, que tiene 29, asoma más factible.
En su extensa carrera profesional, Henríquez jugó durante tres etapas diferentes en Colo Colo de Chile, donde fue varias veces campeón. Y también lo hizo en el fútbol de Portugal y en México. Desde el 2009 es jugador de la Católica, donde logró el campeonato local en la temporada 2010.
Además, integró la selección de su país que logró la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Sidney, en el año 2000.
La posibilidad de negociar la llegada de Henríquez va de la mano de que Pizzi no pueda contar ni con Guillermo Burdisso ni con Diego Braghieri. Algo que puede suceder.
Calandria, por su parte, llegó a la Católica para jugar en estos últimos seis meses desde Santiago Morning, y tuvo la chance de disputar varios partidos. El delantero, que se inició futbolísticamente en Huracán, jugó 12 encuentros del torneo local, en los que anotó 4 tantos; y 4 por la Copa Libertadores, en los que marcó 2 goles más.
Tras emigrar rápidamente de Huracán en 1999, Calandria jugó varios años en el fútbol francés y en el español. Para recalar en 2008 en Gimnasia de Jujuy y en 2009 en Atlético de Tucumán, antes de pasar al fútbol chileno.