La situación económico-financiera de la mayoría de los clubes del fútbol argentino está en crisis. Y no hay dudas de que el parate del fútbol, allá por mediados de marzo último, fue un factor clave para que la coyuntura se agrave. En este contexto, y según los registros del Banco Central de la República Argentina, Rosario Central aparece entre las tres instituciones de la primera división con mayor deuda por cheques rechazados.
A partir de un informe que se hizo público ayer en la cuenta de Twitter @VarskySport, que pertenece al periodista Pablo Varsky, “los clubes de primera división acumulan 511.088.119,66 de pesos en cheques rechazados por carecer de fondos (aún sin cancelar y emitidos durante 2020)”. Pero hay tres clubes que concentran más del 94 por ciento del total de esos más de 500 millones de pesos en cheques rechazados. Y en ese podio figura Central (17,74 por ciento), junto a San Lorenzo (63,70) e Independiente (12, 70), otras instituciones que tienen serios problemas económicos.
Durante este 2020, a los auriazules les rechazaron más de 120 cheques por falta de fondos librados por más de 90 millones de pesos, lo que equivale a algo más de un millón de dólares al cambio oficial. La incidencia de la pandemia ha sido notoria, pero en el caso de Central, la problemática es de arrastre. Los auriazules comenzaron con estos inconvenientes a mediados del año pasado, aunque con un volumen de deuda menor. Hace un año, se trataba de cinco cheques que sumaban poco más de 6 millones de pesos. La cifra actual es 15 veces mayor.
En cuanto al monto exacto de las deudas de clubes por cheques rechazados, al frente del escalafón está San Lorenzo, con 325.579.189,54 de pesos. El segundo es Central, con 90.679.461,90 de pesos. Y tercero aparece Independiente, con 64.946.733,76 de pesos. Más atrás les siguen Huracán con 12.345.103,10 de pesos, y Argentinos Juniors, con 11.713.597,36 de pesos.
Hace un año, otro informe del BCRA había develado que Rosario Central contaba con cheques rechazados por más de 6 millones de pesos con fecha de cobro para julio y agosto de 2019. En ese momento, desde el club admitieron haber tenido inconvenientes financieros temporales, pero aseguraron que esos cinco cheques habían sido cancelados y que los problemas tenían relación directa con la delicada situación económica que atravesaba el país.
De todos modos, este panorama crítico de la economía auriazul ya se conocía. Un par de semanas atrás, a partir de otro informe del BCRA, se supo que durante 2020 Central sufrió el rechazo de 115 cheques por falta de fondos. Y la cifra total estimada de esos valores estaba por encima de los 87 millones de pesos, casi el mismo monto que detalla el nuevo registro.
Los auriazules venían con problemas económicos desde antes que la pandemia paralice la actividad. Pero sin dudas su fragilidad financiera colapsó con la suspensión de la Superliga. En este sentido, los cheques rechazados por falta de fondos forman parte de un ítem en el escenario de deudas que debe afrontar la tesorería canalla. Y muchos de ellos tiene que ver con intentos de pago a otros clubes por pases de futbolistas que se sumaron en los últimos dos mercados de pases. Allí se destaca a Unión como acreedor, ya que desde Arroyito aún deben cancelar pagos por las transferencias de Diego Zabala y Damián Martínez en una cifra que supera el millón de dólares.
No hay dudas, el panorama era complicado y la pandemia lo potenció. Para hacerle frente a esta crítica coyuntura económico-financiera, Central necesita imperiosamente la venta de un futbolista del plantel profesional. Y eso es algo que, al menos por ahora, parece lejano. No hay propuestas firmes, ni clubes interesados por algún jugador canalla.