El viernes por la noche, en el empate ante Vélez en el Gigante, Central logró cortar la pesada racha adversa que acarreaba, de tres derrotas en serie. Y lo hizo además, dejando sensación de merecer algo más. Aunque todavía lejos de conseguir una producción futbolística que entregue cierta confianza en lo propio, el equipo de Miguel Ángel Russo dio un paso bastante firme para frenar lo que parecía una caída libre y sin red.
De cara al encuentro del miércoles en San Juan, la semifinal por Copa Argentina ante Argentino Juniors, esta sensación de rehabilitación era indispensable. Pero todavía queda mucho por mejorar. Es que después de vencer a Newell’s en la fecha 12, el Canalla no pudo ganar en los cuatro partidos siguientes, donde sufrió tres caídas y rescató apenas un empate. Y esto, con un agravante, no consiguió marcar goles en ninguno de esos cuatro cotejos.
El último gol auriazul en lo que va de este torneo fue ante los rojinegros. El autor fue Nery Domínguez, quien anotó a los 36 del primer tiempo. Desde entonces, transcurrieron 414 minutos sin convertir para Central. Esta situación, que genera preocupación, se potencia por el escenario en el que se da: en la antesala del partido más importante del semestre, al menos hasta ahora, para el Canalla.
En los últimos cuatro cotejos, Russo propuso, por distintas circunstancias, diferentes formas de atacar. Esto se dio, tanto en nombres como en los sistemas de juego. Pero hubo un factor común, la baja por lesión de dos delanteros: Franco Niell y Walter Acuña.
En la caída ante Belgrano de Córdoba (0-1), cotejo en el que tampoco pudo contar con Sebastián Abreu, Russo apostó por un 4-4-2. Los hombres de ataque en el Mario Kempes fueron Antonio Medina y José Valencia. El Canalla generó poco, apenas 2 disparos al arco de Olave, y 8 desviados. No hubo mejoras con el ingreso de Javier Correa (NdR. debutó) en reemplazo de Medina durante el complemento.
En la derrota siguiente, frente a Atlético Rafaela en Arroyito (0-2), Russo probó un 4-4-1-1, que mutó en algunos pasajes del partido a un 4-2-3-1. El único hombre de punta definido fue el Loco Abreu, y su compañero más cercano, Pablo Becker. En la segunda parte, el colombiano Valencia reemplazó a Becker, pero el cambio no dio réditos en la zona ofensiva, 3 disparos al arco en todo el partido y otros tantos desviados.
Luego, Central perdió con Estudiantes de La Plata en cancha de Quilmes (0-1). El DT volvió al 4-4-2. Y apostó por el chaqueño Medina y el uruguayo Abreu como atacantes. Pero la falta de gol se mantuvo, hubo 4 remates netos en los 90 minutos, y otros 4 desviados. Tampoco influyó positivamente la inclusión de Valencia para el segundo tiempo.
El último viernes, frente a Vélez en el Gigante, el Canalla cortó la racha de caídas. Y si bien la sequía ofensiva se mantuvo, hubo otra sensación. El sistema fue un 4-1-4-1, con Valencia como único punta. Y en el complemento se sumó el recuperado Niell al ataque. Fue la mejor producción en esta serie post Clásico, con 6 remates netos al arco y otros 6 desviados. No hubo gol, es cierto. Pero, a diferencia de los cotejos anteriores, mejoró la calidad de los disparos al arco. La prueba de ello es que el arquero de Vélez, el uruguayo Sosa, fue la figura del partido.
Para el próximo miércoles en San Juan, es una fija que volverá el 4-4-2. Y que Russo pondrá en ataque a la dupla Niell-Abreu, la que más le rindió. Justamente, la que estuvo en cancha desde el inicio en el último triunfo de Central, hace más de un mes ante Newell’s.
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son los meses que transcurrieron desde la última vez que Central estuvo 4 partidos sin marcar goles. Esto se dio entre fines de setiembre y fines de octubre de 2011, en la B Nacional. Allí, el Canalla no pudo anotar consecutivamente ante Almirante Brown (0 a 0), Independiente Rivadavia de Mendoza (0-2), Quilmes (0-0) y Deportivo Merlo (0-0). Esa serie fue de 424 minutos sin goles.
En la dulce espera
Central continúa con la preparación de cara al partido del miércoles en San Juan, en una de las semifinales de la Copa Argentina. Ayer, el plantel trabajó por la mañana, a puerta cerrada, en el country de Arroyo Seco. Y no hubo pistas sobre el equipo que tiene en mente Miguel Russo para enfrentar a Argentino Juniors.
En principio, habría una duda por línea. Es que en defensa, está descartado el regreso de Tomás Berra, quien se repone de una molestia física. En el mediocampo, el interrogante estaría sobre la izquierda, donde Jonás Aguirre y Pablo Becker disputan una plaza. Mientras que en ataque, Franco Niell podría reaparecer desde el minuto inicial, tras dejar atrás un problema físico.
En defensa, con Berra out, habrá que ver si el DT mantiene a Yeimar Gómez, que fue titular ante Vélez. La otra opción, es que Russo le dé una nueva oportunidad a Lucas Acevedo, que no pudo estar ante los de Liniers por una suspensión.
En el medio, donde el lesionado Domínguez está descartado, Aguirre parece tener más chances que Becker para ser volante sobre la izquierda.
Mientras que por último, en ataque, Niell pelea por su vuelta con el Trencito Valencia.
Con este panorama, el probable equipo para jugar el miércoles desde las 22 en San Juan sería con: Caranta; Ferrari, Pastor o Acevedo, Donatti y Delgado; Encina, Musto, Barrientos y Aguirre o Becker; Niell o Valencia y Abreu.