En el sexto partido amistoso de la pretemporada Central mostró dos caras completamente opuestas. Por un lado fue contundente y efectivo, lo que le permitió convertir seis goles; pero por el otro fue endeble a la hora de defender. Y una clara muestra de ello fueron los cuatro goles que le convirtió Coronel Aguirre.
El equipo de Juan Antonio Pizzi jugó contra un rival que milita en tres categorías más abajo. La diferencia se vio expuesta cuando Central atacó de la mano de Ricky Gómez, por el buen primer tiempo de Santiago Biglieri y por la efectividad del goleador Gonzalo Castillejos.
Pero no hubo diferencias cuando al Canalla lo atacaron. Vulnerabilidad en la marca y a la hora de recuperar el balón fueron las principales vicisitudes del sistema defensivo.
Juan Antonio Pizzi paró el equipo con el sistema que tiene pensado arrancar el torneo: 4-1-3-2.
El entrenador ubicó a Biglieri por la derecha en la línea de tres volantes por encima de Julio Mozzo y pasó Federico Carrizo a jugar en la posición de enganche.
Los cuatro goles en contra no alarmaron al entrenador, quien una vez finalizado el encuentro declaró que “fue lógico por el momento de la preparación en la que está el equipo”.
Si bien aún quedan varios días para el inicio de la competencia, el cuerpo técnico deberá trabajar muchísimo en el sistema defensivo para volver a encontrar la solidez que tuvo en el primer semestre del torneo.