Jesús Méndez entrenó ayer con el plantel canalla. Sí, aunque todavía no acordó su reincorporación a préstamo, el volante se presentó ayer en el predio de Arroyo Seco, invitado por Miguel Ángel Russo, y tomó parte del segundo día de trabajo de pretemporada.
Sorpresivamente. Sin anuncios ni advertencias de ningún tipo, Méndez entrenó ayer junto al grupo principal. Algo similar había sucedido a principio de año, cuando el volante arribó a Necochea pasada la medianoche para incorporarse como refuerzo en la pretemporada de verano.
De esta manera, con su participación en la práctica de ayer, Méndez envió un mensaje inequívoco hacia Boca Juniors, club dueño del pase del mendocino. Como no es tenido en cuenta por el técnico Julio César Falcioni, el mediocampista dejó a la vista su deseo de seguir vinculado a Central.
Por este motivo, Gonzalo Belloso se reuniría hoy con directivos xeneizes para acordar la nueva cesión de Méndez. En este sentido, hay algunos problemas por resolver. Por ejemplo, que si Méndez llega a Central cedido a préstamo, tendrá que extender su contrato con Boca, que finaliza a fin de año.
Teniendo en cuenta este dato, no hay que descartar que los boquenses intenten vender al menos una parte del pase de Méndez. En su momento, hace dos años y medio, Boca pagó alrededor de tres millones de dólares a Central para quedarse con el jugador.
De plantearse una situación de venta de parte de la dirigencia del club porteño, una de las alternativas de los canallas para que esta negociación sea viable, sería poner sobre la mesa el 50 por ciento de los derechos económicos de Damián Díaz. Los auriazules comparten con Boca la propiedad del hábil volante, que estaría muy cerca de convertirse en refuerzo de Cruz Azul de México.
De todos modos, detalles de la negociación de lado, Russo cuenta desde ayer con Méndez, a quien puede considerarse como el primer refuerzo de peso para este ciclo que recién comienza.