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Central superó ampliamente a Newells y le ganó 3 a 0 en el Gigante de Arroyito

Marco Ruben, Nicolás Ferreyra y Luca Martínez Dupuy le dieron el triunfo al canalla que jugó un gran partido y ahora también sueña con la clasificación a la siguiente fase

Después de una buena primera etapa, donde pudo abrir el marcador, Central salió a buscarlo en la segunda parte y consiguió ampliar la ventaja. Marco Ruben, Nicolás Ferreyra y Luca Martínez Dupuy le dieron el triunfo al canalla que ahora sueña con la clasificación.

El clásico comenzó con pocas emociones y disputado en la tenencia, pero una buena combinación colectiva en el canalla permitió establecer la ventaja inicial a los 16 minutos. Tras un pase de Damián Martínez, Marco Ruben tuvo tiempo de recibir en soledad casi adentro del área chica y definir magistralmente ante el achique de Alan Aguerre.

Con el correr de los minutos, y ya con el resultado favor, el equipo del Kily justificó la ventaja. Tuvo el segundo con un remate de «Pupi» Ferreyra que Aguerre neutralizó con una espectacular volada. Los de Burgos tuvieron la suya a través de Cingolani que lo encontró bien parado a Broun.

En el comienzo de la segunda etapa, Nicolás Ferreyra corrigió un remate defectuoso y la acomodó de taco al palo derecho de Alan Aguerre para el 2 a 0. Ya con un Newell’s diezmado, el equipo del Kily llegó al tercero a través de Luca Martínez Dupuy que definió cruzado tras un pase de Pupi Ferreyra.

Central fue justo ganador y hasta sueña con la clasificación a la próxima fase de la Copa de la Liga.

La previa

Se juega el Clásico más pasional del país. La adrenalina fluye como nunca, los hinchas ya dejaron de dormir tranquilos hace varios días, o tal vez semanas. Es el partido que todos esperan, ese que muchas veces marca a fuego el ánimo de los meses posteriores. Se sufre y se disfruta, casi en proporciones similares. Divide a una ciudad, a familias, a amigos.

Central recibe a Newell’s este domingo desde las 21 en el Gigante, en un partido que tuvo una previa polémica y desprolija. Estaba pactado a las 18.40, luego la provincia pidió jugarlo a la noche, AFA se plantó e incluso amenazó con trasladarlo a otra jurisdicción –una locura-, y al final privó la ¿cordura? y se programó para un horario que de alguna manera le permitió a todos salir bien parados de una negociación que se prolongó más de lo imaginado. Y será sin TV liberada, porque los canales dueños de los derechos no aflojaron ni siquiera ante un pedido gubernamental.

Central y Newell’s se vuelven a ver tras un 2020 donde la pandemia dejó a Rosario sin su Clásico. Hubo algunos amagues en la Copa Maradona, pero al final no hubo cruce. Y la crisis sanitaria producto del Covid-19 privó a la ciudad de su fiesta, aunque fuera sin hinchas en las tribunas.

Ambos confirmaron sus formaciones a casi una hora del comienzo del partido:

Central

Jorge Broun
Damián Martínez
Joaquín Laso
Nicolás Ferreyra
Lautaro Blanco
Emmanuel Ojeda
Luciano Ferreyra
Emiliano Vecchio
Diego Zabala
Lucas Gamba
Marco Ruben

DT: Cristian gonzález

Newell’s

Alan Aguerre
Facundo Nadalin
Cristian Lema
Yonathan Cabral
Jerónimo Cacciabue
Franzo Negri
Diego Calcaterra
Pablo Pérez
Luciano Cingolani
Juan Sforza
Maximiliano Rodríguez

DT: Germán Burgos

HORA: 21.
ÁRBITRO: Fernando Echenique.
ESTADIO: Gigante de Arroyito.
TV: TNT Sports y Fox Sports Premium.

Central y Newell’s no llegan de la mejor manera. Si bien en este tipo de partidos la tabla poco importa, el recorrido previo de ambos equipos no genera demasiada expectativa. Aunque al tratarse de un Clásico, la expectativa se pondera, los ánimos por el piso de los hinchas se levantan a partir de la pasión y el deseo de ganar pone al partido en zona de altas palpitaciones.

Central llega con muchos cuestionamientos al Kily González, que da la sensación que se juega mucho en este partido. El DT arrastra críticas desde el torneo pasado, potenciadas con aquella eliminación de Copa Argentina ante Boca Unidos. Y si bien el apoyo de la dirigencia está, el valor de un triunfo o una derrota lo pone frente a un partido donde la continuidad del entrenador podría decidirse con el resultado.

La victoria ante San Lorenzo por Sudamericana fue un buen resultado previo, de esos que tal vez permitieron trabajar con más ánimo, pero si el Canalla no levanta en el juego y no mejora en defensa lo puede pagar caro.

A Newell’s tampoco le sobra nada. Tras la salida de Kudelka, el ciclo Burgos arrancó bancado por los resultados, aunque con una deuda grande desde lo futbolístico. Seis partidos sin derrotas, con dos buenos triunfos ante Lanús y Patronato generaron expectativa en los hinchas, pero la caída ante Gimnasia por la Liga y el golpazo ante Libertad del jueves por Sudamericana abrieron un montón de interrogantes.

El Mono decidió “guardar” muchos titulares ante los paraguayos porque priorizó el choque ante el Canalla. Y la derrota por la Copa lo pone en una situación de cuestionamiento. Puso en riesgo la chance de pelear por clasificar en el torneo continental y le dio un valor aún mayor al Clásico. Si logra un buen resultado, saldrá fortalecido; si falla, quedará tambaleante con un ciclo que apenas comienza.

El Clásico no tendrá gente en las tribunas, eso no le quitará valor ni pasión. En cancha habrá dudas sobre los 22 protagonistas hasta el final. Un poco para no dar ventajas al rival, otro poco por algunos jugadores que llegan “tocados” desde lo físico.

Habrá experimentados, como Emiliano Vecchio, Fatura Broun, Maxi Rodríguez y Cristian Lema. También juveniles o debutantes, esos que saben que un gol o una buena actuación los puede poner en el pedestal de héroes y un partido para el olvido los puede condenar por mucho tiempo.

Rosario se paraliza. Por un momento las palpitaciones de los hinchas subirán a niveles impensados. Manos transpiradas, corazones acelerados, abrazos interminables, rezos sin distinción de credos, pedidos a Dioses paganos o  a esos mitos cabuleros de los que se cree causan efectos positivos o negativos. Todo vale fuera de la cancha para conseguir esa victoria única e irrepetible. Adentro será responsabilidad del Kily y del Mono, que también se juegan mucho. Y los jugadores, obvio. Al fin y al cabo los que decidirán de qué lado caerá la moneda. ¡Hola Clásico!, es bueno tenerte de nuevo en casa.

 

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