La presidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó ayer a Roma y hoy se reunirá con el papa Francisco, en el segundo encuentro a solas desde que el argentino se convirtió en el líder de la Iglesia Católica, en marzo de 2013.
La jefa del Estado arribó ayer pasadas las 11 de Italia (a las 7 de Argentina) para asistir a una reunión privada con el sumo pontífice, hoy a partir de las 13, en la residencia de Santa Marta.
Allí, Cristina Kirchner saludará al Papa en ocasión de cumplirse un año desde su coronación como máxima autoridad de la Iglesia Católica en lo que será el tercer encuentro entre ambos.
El primer encuentro fue en el Vaticano, a pocos días de la asunción de Jorge Bergoglio como Papa, a solas, al igual que el de hoy; y el otro, el 28 de julio pasado, en Río de Janeiro, durante la Jornada Mundial de la Juventud.
El 18 de marzo del año pasado, la mandataria fue recibida por el Sumo Pontífice en sus aposentos privados de Santa Marta y le obsequió un equipo de mate, aunque el intercambio de regalos no quedó allí, dado que su el jefe católico le entregó a la presidenta un par de zapatitos para su nieto, Néstor Iván, durante el segundo encuentro que mantuvieron en Brasil.
La mandataria llegó ayer al aeropuerto internacional Leonardo Da Vinci, de Roma-Fiumicino, y se hospedó en el hotel Edén, ubicado en las cercanías del Vaticano, informó el gobierno a la prensa.
A las 12 (8 de la Argentina), Cristina fue recibida en las puertas por algunos trabajadores del hotel, incluido el cocinero, que se acercó especialmente a la entrada del establecimiento para saludarla, y le entregaron a modo de bienvenida un ramo de rosas rojas en nombre de todo el personal, señaló el portal de la Casa Rosada.
Integran la comitiva oficial el canciller, Héctor Timerman; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, y el de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro.
Durante la recepción también estuvieron presentes las autoridades argentinas que residen en Roma de manera permanente: el embajador ante Italia, Torcuato Di Tella; el agregado económico, Guillermo Moreno (ver aparte); y el representante argentino ante el Vaticano, Juan Pablo Cafiero.
Fue el canciller argentino el único de los miembros de la comitiva oficial en hacer declaraciones a los periodistas presentes en el lugar, destacando el valor de la relación que tiene el gobierno argentino, en especial la primera mandataria, con el sumo pontífice.
“Tenemos una cercanía muy grande con el Papa, y el Papa tiene una cercanía muy grande con el pueblo argentino y con la presidenta en especial”, afirmó Timerman.
Francia, la siguiente parada
Luego de la reunión con Francisco, la jefa del Estado viajará a Francia, donde será invitada de honor para la inauguración del Salón del Libro que se realizará en París.
Allí, la presidenta se reunirá con su par francés, François Hollande, entre el miércoles y el jueves, en un encuentro que tendrá lugar en medio de las negociaciones que se iniciarán en mayo para cancelar la deuda con el Club de París.
La presidenta emprenderá el regreso al país el jueves y se prevé su arribo para el próximo viernes.
Este es el primer viaje de la mandataria a Europa luego de la operación que se le practicó en octubre pasado, a raíz de un hematoma craneano.
El recibimiento de Moreno
Al arribar a Roma, la presidenta Cristina Kirchner fue recibida ayer en la pista de aterrizaje por el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, quien tras renunciar a ese cargo fue designado como agregado económico en Italia. “¿Cómo le va? ¿Qué dice?”, le preguntó la jefa del Estado a Moreno, quien la esperaba para saludarla en las inmediaciones del avión. Tras el saludo con la presidenta, Moreno se abrazó con el canciller Héctor Timerman, quien acompañó a la presidenta.
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