El director del Observatorio de Datos Económicos y Sociales de la CGT opositora, Jorge Sola, informó ayer que en el último semestre de 2013 la pobreza en la Argentina es del 30,1 por ciento, lo que representa “12 millones de pobres”.
Además, Sola alertó que “lo más preocupante es que la mitad de los pobres son niños y adolescentes menores de 15 años”, que pertenecen a “un núcleo duro de pobreza en la que es muy difícil salir”. Sola, quien además es el secretario de Acción Social de la CGT Azopardo que conduce Hugo Moyano, hizo estas declaraciones luego de que se conociera el informe de la Universidad Católica (UCA), que indicó que a diciembre de 2013 la pobreza ascendió al 27,5 por ciento de la población.
Según estos cálculos, la pobreza sería cinco veces mayor de la que dice el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), contrastando la posición del gobierno que asegura que esa problemática se redujo “drásticamente”.
“Nosotros en enero terminamos de cruzar los datos que teníamos sobre pobreza y la canasta. En el último semestre de 2013 coincidimos en la indigencia con la UCA y tenemos cifras similares en cuanto al porcentaje de pobreza”, explicó Sola en diálogo con radio El Mundo.
Al respecto especificó: “A nosotros nos da 30,1 por ciento, con lo cual dentro de las estadísticas en un margen de error coincidimos. Para la UCA la cantidad de pobres supera los 11 millones y para nosotros 12 millones”.
“La canasta básica para nosotros es 2.600 pesos. En marzo, para que un adulto no sea pobre debía recaudar no menos de 76 pesos por día. La canasta de indigencia es de 1.006 pesos, lo que implica una recaudación de 35 pesos por día”, recalcó Sola.
El informe de la UCA
El viernes pasado, el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) dio a conocer un nuevo crecimiento en las mediciones que realiza la institución de la tasa de pobreza, que alcanzó al 27,5 por ciento de las personas y al 17,8 por ciento de los hogares.
La encuesta de la UCA consta de una muestra sobre 5.700 hogares que se realiza en el último trimestre de cada año, de acuerdo con lo señalado por su coordinador, Agustín Salvia.
El informe también destacó que los niveles de indigencia por personas tuvieron una leve baja del 5,8 al 5,5 por ciento, mientras que medida por hogares se mantuvo en el 3,2 por ciento.
Ese informe se dio a conocer 48 horas después de que el Indec dispusiera discontinuar la publicación de las estadísticas oficiales sobre pobreza e indigencia, por cuestiones “metodológicas”, según explicara el propio organismo en un comunicado y el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
Precisamente, el funcionario insistió ese mismo día en que “la pobreza y la indigencia han bajado drásticamente en los últimos años” en el país y que “los opositores todo el tiempo pretenden desnaturalizar los efectos de las políticas adoptadas” por el gobierno.