La mediática Charlotte Caniggia declaró este martes como testigo en la causa en la que se investiga el crimen del empresario Fernando Pérez Algaba, quien en julio pasado fue hallado descuartizado en el interior de una valija en un arroyo de la localidad bonaerense de Ingeniero Budge, y dijo que ella vio a la víctima solo «tres veces» en su vida porque era «conocido» de su actual pareja.
«Lo vi tres veces», dijo a la prensa la hija del exfutbolista Claudio Paul Caniggia al retirarse de la sede de la SubDelegación Departamental de Investigaciones (SubDDI) de Esteban Echeverría, donde prestó declaración testimonial durante casi una hora ante el fiscal a cargo del expediente, Marcelo Domínguez, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de Lomas de Zamora.
Charlotte arribó a las 13.30 junto a su abogado Alejandro Cipolla y antes de ingresar a declarar afirmó: «No sé ni que mierda hago acá.»
«No, para nada. No lo conozco. Lo vi dos veces en mi vida», respondió al ser consultada si tenía alguna relación con el empresario víctima.
Luego, al cabo de la testimonial, el abogado Cipolla explicó que Charlotte respondió «a todas las preguntas» de las partes, por lo que se retiraban «muy tranquilos».
«Ella no debería haber sido citada (a declarar). (El empresario) era amigo de su pareja», añadió el letrado.
Mientras que la propia mediática, antes de retirarse del lugar, calificó su citación en esta causa como «una estupidez».
Fuentes judiciales informaron a Télam que en las actas de la declaración quedó asentado que la testigo afirmó que ella vio a la víctima «tres veces en su vida» durante 2019, en virtud de que el empresario era «conocido» de su actual pareja, Roberto Storino, a lo que Cipolla aclaró que los encuentros fueron en «lugares gastronómicos», en el marco de «reuniones previamente pactadas entre el novio» de Charlotte y Pérez Algaba.
Respecto del departamento de Puerto Madero mencionado por el imputado detenido Horacio Mariano Córdoba (48), comisario de la Policía de la Ciudad, la testigo dijo que lo conoció porque estuvo residiendo allí algunos días en 2020, cuando lo alquilaba su pareja, tras lo cual se mudaron al domicilio que ella actualmente tiene.
A su vez, Charlotte aclaró no tener conocimiento de que ese departamento haya sido utilizado con otro fin que el residencial y que su pareja es la persona que podría saber sobre esa cuestión.
Por último, la testigo aclaró que «nunca tuvo relación con la víctima y/o partes imputadas», más que las tres veces mencionadas en las que la vio.