En 2021, el fiscal de la Agencia de Delitos Complejos y Crimen Organizado Matías Edery asegura haber comunicado a sus superiores los nombres de sus informantes. Entre ellos, Mariana Ortigala, muy cercana al convicto por robo de autos, homicidio y narcotráfico Esteban Alvarado, quien ahora aparece imputada como integrante de Los Monos, bajo los cargos de extorsión y ser testaferro; la mujer fue testigo contra su antiguo allegado en el juicio que contó con el propio Edery como investigador, y su hermano Rodrigo también estuvo en el banquillo en el caso del crimen en el casino City Center. Este miércoles, en la tercera audiencia de la causa que investiga nuevos aprietes de la banda liderada por Ariel «Guille» Cantero, el fiscal Pablo Socca mostró como nueva prueba el peritaje de unos de los celulares de Mariana Ortigala en los que se exponen intercambios de chats que comprometen a su colega Edery, en un celular que la mujer asegura el funcionario le dejó sólo para que se comunicara con él.
Ortigala fue detenida el 11 de septiembre en su casa del country Funes Town. Investigan cómo es que tiene 14 inmuebles a su nombre, bajo la sospecha de que en realidad pertenecen a Los Monos. Un dato singular es que figuran como adquiridos “desde que (a pedido de Edery) entró en el programa de protección de testigos”, en marzo de 2019. Cuando la aprehendieron, la mujer informó a los agentes que uno de los celulares que tenía en su poder, marca Xiaomi, lo usaba solo para pasarle información a Edery. El fiscal Socca, quien trabaja junto a Miguel Moreno en la investigación de los ataques y amenazas al propietario de la cadena de agencias El Califa por parte de Los Monos, pidió peritar los teléfonos.
Este miércoles, en la tercera audiencia del juicio y al brindar elementos para oponerse a la excarcelación de Mariana Ortigala, Socca comunicó que le había llegado el resultado de la apertura de los celulares. Entre ellos, el «exclusivo» para comunicarse con Edery.
Allí hay chats singulares. En uno, por ejemplo, la mujer le comunica el apodo –Flaco, a quien relaciona con la banda de René Ungaro– del probable autor de una de las balaceras perpetradas entre 2021 y 2022 a un negocio de Mendoza y Matienzo, que regenteaba un condenado en causa narco y después pasaron a ser propiedad de la misma Ortigala.
Socca recordó en la audiencia que la investigación de esos ataques la encabezó su par Federico Rébola, para enseguida destacar que Edery nunca le pasó a su colega el dato del supuesto tirador que le había dado su informante Ortigala.
En otra conversación, el contacto agendado «Mati Fiscalía», que se sospecha corresponde a Edery, le escribe a Ortigala que Fiscalía tiene «todas las escuchas» de las conversaciones que el detenido Esteban Alvarado mantuvo con un tal Carmona. Se trata de información sobre una causa en proceso que nunca tendría que haber compartido, menos con una mujer vinculada a las organizaciones criminales, evalúan Socca y Moreno.
Aunque el contenido de los chats se reveló este miércoles, ya existía la presunción de que la causa por las extorsiones y ataques contra el dueño de El Califa podía derivar en impactos institucionales. Por eso, personal de la Auditoría General del Ministerio Público de la Acusación (MPA) inició un monitoreo de las audiencias del juicio, trascendió de fuentes extraoficiales.
También se mostraron en la audiencia chats del fiscal con otra de las imputadas, Lorena Córdoba, viuda del rafaelino fallecido durante la pandemia David Perona -considerado zar del juego clandestino provincial- con mensajes sugestivos. Esta mujer también está ahora imputada en el caso por extorsión al propietario de la agencia El Califa.
La imputación a los 9 integrantes de este grupo al que le adjudican la extorsión y varios ataques incendiarios y a tiros a las agencias de lotería para lograr la entrega de un millón y medio de dólares dejó entrever preocupación institucional: Socca y Moreno dijeron que es de suma gravedad esta situación y agregaron que la colaboración de la Justicia no tiene nada que ver con la impunidad.