Mientras tanto, Santos destacó que desde su asunción como presidente, en agosto pasado, comenzó a “construir una confianza” con Chávez “para avanzar en el restablecimiento pleno” de la relación diplomática entre ambos países, interrumpida años atrás.
“Creo en la palabra del presidente Santos y tengo la certeza de que el gobierno de Colombia no se va a prestar a este nauseabundo juego de Washington a través de sus laboratorios de guerra sucia”, escribió el mandatario venezolano en el artículo de hoy de su columna dominical “Las líneas de Chávez”, que publican varios diarios de Venezuela.
“El imperio presente que Makled sea extraditado a Estados Unidos” porque “quiere usarlo para que vomite toda clase de acusaciones contra la Revolución Bolivariana, contra su liderazgo político y militar, y así incluir a Venezuela en la lista negra de países que apoyan al narcotráfico”, argumentó, según reportaron las agencias noticiosas AVN, ANSA y DPA.
El anuncio de Santos de que extraditará a Makled a Venezuela “tiene la mayor importancia y reafirma la voluntad política común y compartida de no dejarnos descarrilar”, agregó Chávez.
El martes pasado, Santos prometió extraditar a Makled a Venezuela. “Yo le di mi palabra (a Chávez) y una vez que se surtan los trámites jurídicos, se hará la extradición a Venezuela; yo soy un hombre de palabra y este capo tiene que responder ante la justicia venezolana por sus innumerables delitos”, dijo entonces el presidente de Colombia.
Santos ratificó ese compromiso en declaraciones publicadas hoy por el diario bogotano El Tiempo, en las que explicó además que “cuando dos países solicitan al mismo delincuente en extradición, se debe atender la primera solicitud que llegó y en este caso fue la de Venezuela”.
Además, “la solicitud de extradición de Venezuela se hace por más delitos que la de Estados Unidos, que solamente es por narcotráfico, y nuestro Código Penal dice claramente que debe darse preferencia a la solicitud que tiene más delitos”, agregó.
Por otra parte, Santos destacó que junto a Chávez comenzó a “construir una confianza para avanzar en el restablecimiento pleno de las relaciones” entre ambos gobiernos.
“Queremos una relación sólida, en la que el respeto y la cooperación sean los principios orientadores; nos falta mucho por recorrer, pero ha sido mucho lo que hemos avanzado; la entrega de tres guerrilleros y de algunos narcotraficantes de peso son hechos concretos que demuestran que también en materia de seguridad estamos avanzando”, sostuvo.