El presidente chino Xi Jinping pretende llevar la cooperación con América latina y el Caribe al terreno de la prensa y la cultura, consciente de que es un instrumento vital para afianzar la imagen del gigante asiático en la región.
Durante su visita a Chile, anteayer, el presidente inauguró la Cumbre de Líderes de Medios de Comunicación, en la que participan durante dos días un centenar de representantes de los principales medios de 24 países de América latina y el Caribe y China.
“Los medios de comunicación pueden hacer un gran trabajo para dar continuidad e impulso a la amistad entre ambas partes”, recordó el presidente chino en la inauguración de esta “iniciativa creadora”, la que calificó de “gran evento en la historia del intercambio” entre ambas regiones.
Para revestirla de un aura de solemnidad y neutralidad, China quiso que se lleve a cabo en la Cepal, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, un organismo de Naciones Unidas.
En su discurso de inauguración, Xi alentó a los medios de la región a que abran sucursales y corresponsalías en el gigante asiático, dispuesto a ofrecerles las “mejores condiciones” para desarrollar su trabajo.
Asimismo, anunció que, en los próximos cinco años, su país formará a “500 profesionales” chinos en la región, establecerá un Centro de Intercambio de prensa e invitará a periodistas latinoamericanos a visitar y realizar estudios en su país.
Algunos de los participantes ya fueron invitados en las últimas semanas a China a seminarios para explorar la cooperación en materia cultural, en particular en cine y televisión.
Cooperación cultural
Esta política “obedece a una necesidad muy fuerte de China de expandir su cultura sobre todo acá en América latina y podemos aprovechar algunas ventajas que pueden abrirse para nosotros”, dice a la AFP el cineasta argentino Miguel Pereira, uno de los participantes del encuentro, quien predice que, en los próximos cinco años, la política exterior de Pekín para el continente va a estar “centrada en lo cultural”.
Aunque “es muy difícil hablar de cooperación entre países muy pequeñitos y el gran gigante como es China, que tiene una cultura milenaria y una paciencia infinita” y sobre todo una “política de Estado” de largo plazo, reconoce.
China es un país cuestionado por su censura de prensa. A principios de este mes, el Parlamento aprobó una ley sobre la ciberseguridad que limita la libertad de expresión en internet y obliga a las empresas, incluidas las extranjeras, a cooperar con el Estado para “proteger la seguridad nacional”.
El Parlamento chino también aprobó una ley de censura cinematográfica, que prohíbe a partir de marzo de 2017 los contenidos considerados como perjudiciales para “la dignidad, el honor y los intereses del país”.
China también aspira a convertirse en potencia mundial en exploración astronómica, para lo que firmó un convenio con la Universidad Católica del Norte (UCN) de Chile con miras a crear un observatorio de investigación científica en Cerro Ventarrones, en la región de Antofagasta, dentro del circuito donde se emplazan los principales centros de observación astronómica del mundo.
América latina es prioridad
Que América latina es una prioridad para la segunda economía mundial lo demuestra que esta es la quinta gira que realiza Xi a la región, tres como presidente y dos como vice.
Según el informe “Relaciones económicas entre América latina y el Caribe y China: oportunidades y desafíos”, presentado este martes por la Cepal, el comercio de bienes entre los dos bloques se multiplicó 22 veces desde 2000, alcanzando su máximo histórico en 2013.
En los dos últimos años, cayó 23 por ciento, debido a la desaceleración de China, que se traduce en una menor demanda y en la caída de los precios de las materias primas que componen el grueso de la pauta exportadora de América latina al gigante asiático.
China desplazó en 2014 a la Unión Europea como el segundo socio comercial de la región, aunque la canasta exportadora es mucho menos sofisticada de la que llega al resto del mundo pues sólo cinco productos representaron el 69 por ciento del valor de los envíos de los países latinoamericanos a China en 2015.
Xi concluyó ayer en Santiago la gira regional que lo llevó a Ecuador y a Perú, donde participó en la reunión del Foro de Cooperación Asia Pacífico (Apec), realizada el pasado fin de semana en Lima.
Ante la política proteccionista que anunció el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, Pekín pretende convertirse en el adalid del libre comercio mundial.