China empezó a desarrollar una vacuna contra el nuevo coronavirus que hasta el momento provocó al menos 56 muertos entre los 1.975 contagiados diagnosticados en el país asiático, informó ayer la prensa local.
En tanto, el Ejecutivo Nacional de China, informó este domingo que construirá en quince días su segundo hospital para atender 1.300 pacientes contagiados en la ciudad de Wuhan. El nuevo centro asistencial es una edificación prefabricada y se suma a otro centro que estará terminado el próximo 3 de febrero.
El científico Xu Wenbo, del Centro de Prevención y Control de Enfermedades, indicó que el organismo ya estaba desarrollando una vacuna contra el coronavirus “después de lograr aislar con éxito la primera cepa del virus”, publicó el estatal Diario del Pueblo y reprodujo la agencia de noticias EFE.
La noticia llega en un momento en el que China está ampliando las medidas de prevención para la propagación del virus, como el cierre de los accesos a la localidad suroriental de Shantou o la suspensión del servicios de los micros interprovinciales en Beijing, Tianjin, Xian y en la provincia de Shandong.
Shanghai, en el este del país, que anteayer registró su primer muerto por la enfermedad, anunció la suspensión de la línea de tren que conecta el centro de la urbe con el barrio de Anting, fronterizo con la provincia de Jiangsu.
El diario estatal Global Times aseguró que 3,16 millones de mascarillas –primera medida de prevención– llegaron ayer a la ciudad de Wuhan, de 11 millones de habitantes, epicentro del brote y con los accesos cerrados desde el pasado jueves.
A los viajeros que hayan estado recientemente en Wuhan, las autoridades chinas les pidieron que permanezcan en sus casas durante 14 días e informen inmediatamente a los centros de salud competentes si desarrollan los síntomas de la neumonía causada por el coronavirus.
La limpieza y esterilización diaria de micros, vagones y estaciones de transporte público es otra de las medidas de prevención puestas en marcha en Beijing.
La Comisión Nacional de Sanidad de China informó este domingo que al menos 56 personas murieron entre los 1.975 infectados diagnosticados en el país asiático, 324 de los cuales permanecen en estado grave.
Los síntomas del nuevo coronavirus, son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden venir acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).
La OMS advirtió que habrá más casos en todo el mundo del nuevo coronavirus, tras confirmar los casos de Francia y Australia. Y también afirmó que se espera que aparezcan más casos exportados en otros países y llamó a las autoridades a estar “preparadas”, según un comunicado recogido por Europa Press.