Leonardo Cáceres tenía 47 años y era chofer de Rosario Bus. Hoy al mediodía tomó el servicio de la línea 143 y unos 40 minutos después de comenzar el servicio, mientras iba manejando, se descompensó. Y luego murió. Fue en Ayacucho al 5200, entre Anchorena y Regimiento 11, en la zona sur de la ciudad.
Según relató Roberto Di Guria, de la empresa Rosario Bus, Cáceres tuvo un infarto, lo que determinó que perdiera el conocimiento. Un pasajero que se dio cuenta de lo que ocurría tiró la palanca de cambio y frenó el coche lo que evitó un choque. Tres mujeres que iban en el colectivo sufrieron golpes.
En la esquina en la que se produjo la frenada había un chofer de la 102 que esperaba para tomar el servicio. También una ambulancia de la empresa Vitar, pero pese a las tareas de reanimación que realizaron los médicos, no pudieron salvarle la vida.
Cáceres hacía seis años que trabajaba en la empresa y no tenía antecedentes que pudieran advertir sobre un infarto, según Di Guria. Estaba casado y tenía niños pequeños.