El gobernador del Chubut, Mariano Arcioni, desmintió que su administración tenga la intención de gravar con un «impuesto al viento» a la energía eólica, informó este martes la Subsecretaría de Información Pública provincial.
El documento oficial adjudicó la especie a «versiones que circularon», aunque había sido su ministro de Infraestructura, Raúl Chicala, quien realizó el anuncio hace dos días.
En la desmentida al propio integrante de su gabinete, Arcioni expuso que “se piensa en el desarrollo productivo de la provincia, con las energías renovables y con empresas tributando como corresponde, por lo que no existe un impuesto al viento ni nada que se le parezca».
“Estamos más preocupados en generar inversión y desarrollo de energías limpias y garantizarlas con seguridad jurídica que en recaudar impuestos, porque alentamos las actividades productivas sustentables y generamos las herramientas para su fomento y radicación en la provincia”, sostuvo.
El mandatario destacó las potencialidades de desarrollo de la provincia: “En la actualidad estamos apuntando al desarrollo y a la producción que se merece nuestra provincia, buscando ampliar a mediano y largo plazo nuestras capacidades”.
Agregó que «la provincia que planificamos requiere de importantes inversiones en el sistema de transmisión eléctrica y una mayor interconexión, y eso se podrá lograr con una mayor rentabilidad para Chubut, en base a lo que acá se produce”.
La ley que promueve la actividad de la energía eólica fue impulsada por el ex senador nacional por Chubut Marcelo Guinle.
El marco normativo que creó declara de interés nacional el fomento de esta forma de generación para lo cual fija un precio diferencial y brinda beneficios impositivos.
Esto fue recordado por Arcioni al indicar que «Guinle fue promotor de la normativa sobre energías renovables, gracias a lo cual hoy vislumbramos una reconversión en los paradigmas energéticos”.
Se verá cómo sigue esta historia… Esperemos que nunca sea cambiada aquella célebre frase de Roberto Mano de Piedra Durán y se transforme en: «Viejo es el viento, pero sigue tributando».