El juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena citó como testigos a la vice presidenta Cristina Fernández de Kirchner y al jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, para mostrarles las evidencias halladas en relación a un supuesto espionaje ilegal del que habrían sido víctimas durante los cuatro años del gobierno de Mauricio Macri por la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). La citación a ambos se resolvió para mostrar esa evidencia, luego de lo cual podrán resolver si se presentan como querellantes en el caso, informaron fuentes judiciales.
Villena investiga el supuesto espionaje ilegal a políticos, funcionarios y periodistas, en una pesquisa que se abrió a raíz de los dichos de un narcotraficante arrepentido.
En el caso de la vicepresidenta, el juez bonaerense la convocó para este lunes en horario a definir.
Las citaciones se resolvieron para que «tomen conocimiento de las pruebas» y «hagan las manifestaciones» que consideren, explicaron las fuentes.
«Los sótanos de la democracia»
El presidente Alberto Fernández expresó este viernes su «compromiso» para «no dejar que los recursos de la inteligencia del Estado se usen en desmedro de ciudadanos, piensen como piensen» y al referirse sobre las denuncias de presunto espionaje de la anterior gestión señaló que «los sótanos de la democracia los vamos a clausurar para siempre».
«Tengo un compromiso frente a la sociedad argentina: esos sótanos de la democracia los vamos a clausurar para siempre y no dejaremos que los recursos de inteligencia del Estado se usen en desmedro de ningún ciudadano, piense como piense», sostuvo el presidente este viernes, durante su visita a La Pampa.
Acompañado en una conferencia de prensa por el gobernador local, Sergio Ziliotto, Fernández destacó que «es responsabilidad del gobierno que nunca más el Estado haga espionaje fundado en cuestiones personales o políticas, porque en democracia respetamos la vida privada».
«La interventora en la AFI, Cristina Caamaño, detectó la intrusión del organismo en mails de personas y lo que hicimos fue denunciarlo; luego un juez notó una actividad de inteligencia interior dentro del Servicio Penitenciario Federal y estamos colaborando para que se investigue», explicó Fernández.
Por último, el mandatario subrayó que «lo único que hace el gobierno es hacerle saber a la Justicia lo que encontró y después no hay ninguna interferencia».