La Justicia rosarina condenó a la empresa AMX Argentina SA, que gerencia en el país a la telefónica Claro, a entregarle en un plazo de 15 días un automóvil Mini Cooper a un cliente por publicidad desleal. “Nos encontramos frente a publicidad tendiente a engrosar las facturas de los usuarios”, observó el juez en su fallo.
El 2 de noviembre de 2008, la esposa de Miguel Antonio G. recibió en su celular un mensaje enviado por Claro mediante el cual la invitaban a ganar un automóvil 0 kilómetro, y para ello debía enviar la palabra “mini” al 333, con un costo final por cada mensaje de 2,99 pesos. La mujer respondió y, de esa manera, inició su participación en un juego que consistía en responder preguntas por SMS. Según Miguel Antonio G., él se sumó luego al juego contestando desde su teléfono las preguntas requeridas.
De acuerdo con el relato del hombre, el 3 de noviembre recibió un mensaje que le indicaba que había ganado todos los puntos (39.650) del desafío. Cuando intentó comunicarse para que le explicaran cómo seguir y si había efectivamente ganado el Mini Cooper, no recibió respuesta clara. Entonces llamó al número de atención al cliente de Claro, desde donde lo derivaron a otro operador, que le informó que en realidad había obtenido “el derecho a participar en el sorteo de un Mini Cooper 0 kilómetro por la Lotería Nacional con el número de su celular y el agregado de la característica de área”, y que si ganaba le iban a avisar.
Cuando recibió la primera factura de Claro, Miguel Antonio G. comprobó que su gasto se había incrementado cinco veces debido a los mensajes de texto que envió por el juego.
Por eso, denunció a la empresa telefónica en la Oficina de Defensa del Consumidor. Hubo una serie de audiencias que se prolongó hasta junio de 2010. Las partes nunca se pusieron de acuerdo, por lo cual se dio por agotada la instancia de la conciliación. El hombre, entonces, presentó una denuncia en la Justicia por presunta infracción a la ley 24240. Aseguró haber sido víctima de publicidad engañosa e incumplimiento del deber de información. Reclamó daños por incumplimiento contractual y pidió la entrega del vehículo.
“En momento alguno del intercambio de mensajes la accionada (la empresa telefónica) hace referencia alguna a la existencia de bases de un concurso y a la necesidad y/o conveniencia de que el actor procediera a consultar las mismas, lo que ya de por sí denota la existencia de publicidad engañosa; como bien dice el actor, si hubiese sabido que lo único que obtenía era un derecho a participar en sorteo por la Lotería Nacional no hubiera jugado”, indicó el juez en lo Civil y Comercial Hernán Carrillo, quien al analizar la mecánica del juego consideró que “nos encontramos frente a publicidad tendiente a engrosar las facturas de los usuarios”.
El juez no hizo lugar al pedido de Miguel Antonio G. de lograr un resarcimiento por daño moral, ya que “no se ha comprobado la existencia de dolo por parte de la accionada”. Por eso sólo hizo lugar parcial a la demanda y ordenó que la empresa Claro le entregue a su cliente, en “el término de 15 días”, un automóvil Mini Cooper 0 kilómetro.
Chiquito de alta gama
El precio de referencia de un Mini Cooper 0 kilómetro es de 300.000 pesos en el país, según los sitios especializados. Es un coche fabricado por BMW y pensado para consumidores jóvenes de buen poder adquisitivo. La historia de este automóvil se remonta a la Gran Bretaña de fines de los años 50, cuando lo comenzó a producir la British Motor Company. Rápidamente se hizo muy popular y en sus versiones clásicas aún se lo puede ver en películas y series. De hecho, es considerado por buena parte de los europeos como el automóvil del siglo más influyente en todo el mundo, sólo detrás del Ford T.