Restan ocho capítulos. Quedan 24 puntos en juego. Y todo puede pasar en esta cambiante película llamada «Clausura 2011». Anoche se le puso punto final a la fecha 11 de un certamen doméstico tan irregular como apasionante, ya que aunque parezca irrisorio decirlo, los 20 equipos tienen chances matemáticas. Sí, increíble pero real.
Vélez, que venía de tomar por asalto la punta tras vencer en la semana a San Lorenzo en el pendiente, sintió el cansancio por jugar copa y torneo y se dio un tropezón de aquellos ante el modesto Quilmes de Caruso Lombardi, que poco a poco sale del fondo, aunque su destino parece tener como final el descenso a la B Nacional.
El golpe del fin de semana lo dio Godoy Cruz. Tumbó a River en el Monumental sin apartarse de su libreto y sigue al pie del cañón, con las ilusiones más que intactas.
El Millo fue más de lo mismo, ya que no lució y siguió con su fútbol utilitario, aunque en esta ocasión falló en su propia área.
El que volvió a desperdiciar otra chance (y van…) es Racing, que tenía todo para meterle presión a Vélez, pero contó con errores propios (erró cerca de una decena de situaciones de gol) y ajenos (penal no cobrado por Pompei contra Teo Gutiérrez) que finalmente lo dejaron con las manos vacías.
Otra de las buenas noticias fue la vuelta al gol de Martín Palermo, quien dejó atrás una sequía de 953 minutos sin anotar. El Titán se sacó las ganas ante Huracán en una goleada de Boca que lo ubica a siete unidades del líder. Por rendimiento, está lejos, muy lejos. Por la irregularidad del torneo, no lo dejen fuera de carrera…
Dos grandes siguen a los tumbos. San Lorenzo patinó en Victoria y se quedó sin técnico, mientras que Independiente tenía todo para ganar y dejó escapar el triunfo ante All Boys en el mismísimo Libertadores de América.
¿Newell’s? Parece que ni el cambio de técnico le vino bien. Mejoró en ciertos aspectos, aunque sigue cometiendo errores infantiles (el gol de Achucarro uno de ellos) que le terminan costando muy caro. Encima, Bieler se olvidó de lo que es hacer un gol y así todo se hace más que cuesta arriba. Cinco puntos de treinta y tres, un saldo que asusta pensando a futuro. La jornada 12 pinta como una de las más esperadas (Racing vs. River, Estudiantes vs. Vélez, Boca vs. Independiente), pero es sólo una más en un camino que por ahora no tiene a un gran candidato.