Con lluvias por fin en la segunda quincena, en marzo hubo un quiebre en la situación de persistente sequía en la región y en Rosario en particular, con algunas precipitaciones puntuales abundantes y distribución desigual. Es el indicio de que, poco a poco, el fenómeno de La Niña cede paso a su contraparte de El Niño. Lo que se espera para este invierno, según el informe semestral del Centro Meteorológico y Climático SAT con asiento en Granadero Baigorria, es una estación con temperaturas algo mayores a las históricas en promedio, aunque no quita que haya períodos de frío intenso por las clásicas irrupciones polares de la época. Lo anterior será sin una recuperación total en el nivel de aportes pluviales. Para octubre, encambio, se estima la irrupción de una anomalía de lluvias en abundancia, con lo cual se prevé un aumento de caudal y nivel en el río Paraná desde mediados de primavera.
El informe del SAT indica que los modelos de previsión para los próximos meses apuntan una tendencia de elevación en la temperatura del agua superficial del Pacífico ecuatorial, zona de interés para el fenómeno El Niño Oscilación
del Sur. Esto repercutirá en una paulatina salida del fenómeno La Niña, aunque los efectos sobre Rosario y la región recién se notarán hacia el final del invierno. Es que, por otro lado, para el Atlántico en las costas del sur de Brasil y Uruguay se estima una tendencia al enfriamiento, lo que puede compensar el fenómeno en el Pacífico ecuatorial. Las dos situaciones combinadas hacen prever precipitaciones algo por debajo de los valores medios hasta septiembre. Eso en general: en algunas zonas son probables valores normales aunque por períodos.
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Octubre, mes de cambios
De acuerdo a los modelos climáticos, en octubre hay probabilidad de una gran anomalía positiva de precipitaciones en la región del NEA, que es la cuenca de aporte directo a los ríos Paraná e Iguazú. Esto podría repercutir en una elevación de los niveles de ambos cursos de agua desde mediados de la primavera.
Las razones, en principio, pueden atribuirse a la transición hacia una situación de El Niño a partir del final del invierno, lo que provocaría precipitaciones por encima de la media para la próxima temporada primavera/verano en la regiónde Rosario.
Los modelos matemáticos señalan que, en valores medios, las temperaturas se mantendrían algo por encima de lo normal durante el semestre. Esto es el panorama general, que incluye posibles períodos de marcas bajas por elingreso de masas de aire polar que son comunes en la época otoño/invierno.