Con unos 40 mil platos vendidos y tras haberse extendido por un fin de semana más debido al éxito de la convocatoria, terminó este domingo el capítulo gastronómico de la Fiesta y Encuentro Nacional de Colectividades, que por primera vez debió desarrollarse de manera virtual en el marco de la pandemia, en lo que constituyó una gran apuesta y desafío por parte del municipio y las asociaciones que protagonizan el evento masivo y popular más emblemático de la ciudad.
Durante tres fines de semana consecutivos, los organizadores destacaron la continuidad de la Fiesta pese al contexto de pandemia, la predisposición de las Colectividades para asumir el desafío de la virtualidad, la satisfacción por los resultados y el gran acompañamiento de rosarinos y rosarinas legitimando una vez más al encuentro que desde hace 36 años distingue a la ciudad, a la par de haberse explorado con acierto nuevas formas de venta y de vinculación con el público, todo ello -por supuesto- en paralelo al más profundo y firme deseo de volver al Parque Nacional a la Bandera el año que viene.
Por lo pronto, y más allá del saldo de la oferta gastronómica, cabe recordar que las propuestas culturales que forman parte del encuentro se seguirán desarrollando a través de las redes del evento hasta fin de mes, y en este sentido también se destacó la notable difusión alcanzada en aspectos como difusión de trajes típicos, pasos de bailes, recetas de cocina y producciones destacadas de las distintas colectividades.
A modo de ejemplo, Tik Tok -una aplicación de medios de iOS y Android para crear y compartir videos corto- fue tendencia alcanzando las 23.506 reproducciones y los 4.196 comentarios.
También continúa hasta fin de mes la propuesta Guardianes de Tradiciones, iniciativa de la Dirección de Adultas y Adultos Mayores del municipio que acompaña la 36º edición de la Fiesta con contenidos audiovisuales, radiales y charlas online con referentes de distintas comunidades que dan a conocer sus aportes como responsables de resguardar y transmitir el patrimonio cultural de sus pueblos de origen o pertenencia.
La Fiesta arrancó el 6 de noviembre con un gran esfuerzo de movilización para las 48 asociaciones participantes: 34 ofreciendo gastronomía del mundo a través de unos 80 platos típicos, mientras que las restantes se sumaron en el capítulo de difusión de aspectos culturales de sus países y regiones.
Las propuestas culinarias estuvieron disponibles en la plataforma Vidrieras en Red a través de la cual se gestionaron los pedidos con anticipación. Y en este caso dicho canal -implementado por el municipio como aporte al comercio local en los primeros tiempos de pandemia- no sólo cumplió su rol destacado en el evento, sino que Colectividades operó como una formidable herramienta de posicionamiento para dicha vidriera virtual, la que registró un crecimiento exponencial de un 360 %, con más de dos millones de visitas de usuarios y usuarias que ingresaron allí para conocer las opciones ofrecidas por cada colectividad.
En este sentido las páginas más visitadas fueron las de Japón, seguida por las colectividades de Israel, alemana, argentino-yemení, libanesa, Centro Navarro y Alcara Li Fusi.
Entre los platos más solicitados, el primer lugar correspondió a los cannolis (postre ofrecido desde la Asociación Alcara Li Fusi y la Casa Familia Siciliana), seguido por los sfijas, tempura, tortillas, anticuchos, paellas, chucrut, strudel, calderetas y sidra vasca.
También se destacaron en el ránking de sabores los menús italianos (lasagnas, pizzas y porchettas), el menú degustación de Brasil y los combos israelíes con shawarma, snickes, humus y falafel.
Capítulo aparte merece la performance de la colectividad de Tanzania (una de las asociaciones más nuevas) con casi 2 mil platos vendidos, lo que de algún modo le valió el calificativo de «revelación».
