Pasadas las 11.30 (de Buenos Aires), crece la expectativa por la definición de un nuevo capítulo del «Juicio del Siglo». El juez del segundo distrito de Manhattan, Thomas Griesa, reunió a los abogados de las dos partes (Argentina y los fondos buitre) y al mediador Daniel Pollack para anunciarles una de dos decisiones: o decide un embargo para el próximo lunes de la cuenta del país en el Bank of New York (BONY) o deja pagar en tiempo y forma los vencimientos por más de u$s 1.000 millones que la Argentina tiene que concretar el 30 de junio.
Ámbito Financiero reveló que si la orden de Griesa es esta última, el país y los fondos buitre comenzarán una rueda de negociaciones que, como mínimo, podría durar hasta septiembre cuando el Gobierno deba nuevamente cumplir con el pago de nuevos vencimientos de deuda «performing» (con pagos actualizados y emitida luego del default de 2001).
Si el magistrado de primera instancia decide lo contrario, y ejecuta su fallo de octubre de 2012 que obliga a la Argentina a pagar al contado unos u$s 1.330 millones a los fondos buitre NML Elliot, Aurelius, Olifant, ACP Master, Blue Angel, y otros 13 litigantes particulares argentinos; el Gobierno de Cristina de Kirchner deberá tomar una decisión política: o acepta la decisión del juez, baja la cabeza y continúa negociando; bajo el peligro además de comenzar a aplicarse automáticamente la cláusula Rights Upon Future Offers (Rufo); o, inicia una guerra judicial que podría derivar en múltiples y cruzadas causas abiertas dentro de los Estados Unidos o incluso llevando el «Juicio del Siglo» hasta tribunales internacionales como La Haya.
En la audiencia están presentes por la Argentina los abogados Jonathan Blackman y Carmine Bocuzzi del estudio Cleary Gotlieb Steen & Hamilton (CGS&H) y Theodore Olson y Robert Cohen del fondo Elliot, y Stephen Poss y Robert Carroll de Olifant, los profesionales que representan a todos los acreedores vencedores en el caso. Todos escucharán a Griesa y no podrán hacer preguntas, y cualquier decisión que tomen como actuantes de las partes deberá ser comunicada a Pollack.