El intendente de Paraná, Sergio Varisco (Cambiemos), comenzará a ser juzgado este jueves, acusado de financiar a bandas dedicadas al narcotráfico, hecho por el que están detenidos un concejal y a otros funcionarios del municipio.
El debate oral, que se iniciará este mediodía, tendrá a 34 imputados y más de 100 testigos, que se presentarán en la sala de audiencias de la Cámara Federal de Apelaciones de Paraná.
El Tribunal Oral en lo Federal (TOF) de la capital entrerriana, integrado por los jueces Lilia Carneo, Noemí Berros y Roberto López Arango, decidió unificar dos expedientes en los que se investigan infracciones a la ley de drogas por parte de una misma organización delictiva.
El intendente Varisco, de 59 años, fue imputado porque presuntamente hizo «un acuerdo en septiembre de 2017» con Daniel «Tavi» Celis, acusado de ser el líder de la banda, y «se comprometió a entregar 50.000 pesos mensuales para financiar el comercio de estupefacientes».
Para el juez federal de Paraná, Leandro Ríos, Celis junto a Varisco, «comercializaron cocaína de manera conjunta y organizada».
La banda se encargaba de la «financiación, provisión, distribución, aprovisionamiento, almacenamiento, abastecimiento, venta, reventa y compra» de esa droga en Paraná y Concordia, y desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, según la pesquisa.
Este miércoles, en declaraciones a la prensa local, Varisco aseguró que «no hay ninguna prueba, ni testimonio» que lo vincule con esa acusación.
«Estoy bien, muy tranquilo y contento porque no hay nada, se va a conocer mi verdad y se va a terminar esta diatriba que se armó en mi contra», agregó el intendente, quien aseguró que no tiene «miedo» de ser condenado, ya que nunca tuvo contacto con ese «submundo».
Varisco se encuentra excarcelado, ya que la justicia dispuso que «se mantenga en libertad ya que ejerce el cargo de presidente municipal», aunque le trabó un embargo de millón de pesos sobre sus bien.
También se le prohibió salir del país y debe presentarse todos los viernes en el juzgado e informar si tuviera que ausentarse de su omicilio por más de tres días.
La investigación se inició el 28 de mayo de 2017 cuando la Policía Federal Argentina (PFA) sorprendió a la banda mientras descargaba más de 317 kilos de marihuana de una avioneta en la localidad entrerriana de Colonia Avellaneda, cerca de Paraná.
Tras la detención de más de 20 personas, se allanó la celda donde «Tavi» Celis cumple condena por robo y se lo acusó de comandar la organización narco aprovechando sus contactos políticos y policiales para comercializar drogas en la zona.
A comienzos de mayo de 2018, en el marco del mismo expediente, la Justicia allanó la Municipalidad de Paraná, la Legislatura y domicilios vinculados al intendente, diligencias en las que se obtuvieron elementos que se sumaron a la causa y derivaron en los procesamientos.
Un mes más tarde, el juez Ríos, ordenó la prisión preventiva al concejal Pablo Hernández (Cambiemos) y a la subsecretaria de Seguridad municipal, Griselda Bordeira.
Hernández continúa alojado en la Unidad Penal 6, mientras que Bordeira en la cárcel de mujeres.
Además, en febrero de este año, Ríos procesó a Varisco, Hernández y Bordeira, por «financiamiento, comercialización y adquisición de estupefacientes».
Varisco figura como «financiador y adquiriente» de la droga, Hernández como «adquiriente colaborador» y Bordeira como «adquiriente colaboradora».
Procesado, Varisco buscó mantener la intendencia y se presentó en las elecciones provinciales y si bien superó las internas, en las generales del 9 de junio pasado quedó en segundo lugar, a más de 10 puntos del candidato peronista y vicegobernador, Adán Bahl.