El sistema tecnológico D.A.G (detección automática del gol) es la herramienta que podría haber cambiado la historia del Superclásico en el que Boca venció 3-2 a River en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba. Es que a los equipos grandes no les gusta perder con polémicas, lo habitual es que siempre sean favorecidos y cuando no lo es, buscan responsables afuera y no internamente.
Tras lo que fue el triunfo del ‘Xeneize’ sobre el “Millonario” en los cuartos de final de la Copa de la Liga, se instaló la polémica en torno al gol que le anularon a River, con el partido 1-1, por considerar que la pelota no ingresó por completo al arco de Sergio Romero. Un rato después de que el árbitro Yael Falcón Pérez invalide el tanto de Facundo Colidio, Boca dio vuelta el encuentro que terminaría ganando 3-2.
Justamente, Romero se refirió a dicha jugada y pidió por la implementación de una herramienta tecnológica que podría ayudar a facilitar la resolución de estas situaciones de interpretación: “No llego a entrar la pelota. Lo importante es que la tecnología muchas veces se usa bien, pero lo más importante es que el árbitro tenga el reloj, que te dice si fue gol o no al instante”.
Una herramienta tecnológica y muy costosa
La herramienta a la que se refiere el ex arquero de la Selección argentina es el sistema tecnológico D.A.G (detección automática de gol) basado en cámaras cenitales sobre la línea del arco y un chip dentro de la pelota, conectado al reloj del árbitro.
Cuando todo el diámetro de la pelota cruza la última parte de la línea de gol, el sistema le enciende al referí el reloj al instante, señalándole que fue gol y las imágenes de las cámaras se usan como prueba para mostrar el balón completamente del otro lado de la línea.
El arquero de Boca habló con conocimiento de causa ya que, en su paso por el Manchester United Inglaterra, convivió con ese sistema que se implementó en la Premier League para la temporada 2013/14. Luego se sumaron la Bundesliga de Alemania, la Ligue 1 de Francia y la Serie A de Italia.
Esta tecnología es muy costosa y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) no podría afrontar dicha implementación. Su uso obligaría a invertir unos 5 millones de dólares por temporada, considerando que se juegan 567 partidos entre Liga Profesional y Copa de la Liga.