Sin ninguna pista que permita inferir qué pasó, se cumple hoy un año de la desaparición del piloto Alejandro Ferzola, de quien se perdió todo rastro luego de que despegara con un helicóptero Robinson 44 desde la localidad bonaerense de Coronel Brandsen para dirigirse hacia el balneario de Santa Teresita convocado a colaborar en los operativos de control de tránsito en la costa atlántica.
Ferzola, un ex comisario platense con amplia experiencia en el manejo de estas aeronaves, salió el 2 de enero de 2011 a bordo de un Robinson 44 naranja para realizar patrullajes por los operativos de control vial de verano, pero su rastro se perdió en el trayecto.
Desde ese día se lo buscó de manera intensa, tanto por la ruta de trayecto, los alrededores y lugares cercanos, pero no hubo novedades.
“Espero que no sea otro caso Pomar (la familia que estuvo desaparecida durante 24 días hasta que la encontraron muerta cerca de la localidad bonaerense de Salto). Que lo busquen bien. Esto es terrible, una gran incertidumbre. No iba en bicicleta; manejaba un helicóptero. No puede ser que nadie sepa nada. Tienen que ampliar las zonas de búsqueda”, reclamó Beatriz Marasio, la madre de Ferzola en su momento.
Cuando hacía sólo algunos días que se había producido la desaparición del piloto, la mujer pedía que se extendieran los lugares para buscarlo.
Los operativos que realizó la Administración Nacional de la Aviación Civil se llevaron a cabo por cuadrículas, en lugares específicos, dentro del área de probabilidades en las que podrían detectar al piloto o la aeronave.
Mientras se intensificaba su búsqueda, se multiplicaban los trascendidos. Uno señalaba que había sido secuestrado porque en el helicóptero llevaba dinero.
También se dijo que había sido asesinado de un tiro en la cabeza o que se había escapado con plata de un robo de boqueteros a la sucursal del Banco Provincia de Belgrano, perpetrado entre el 31 de diciembre de 2010 y el 2 de enero de 2011.
Sin embargo, la hipótesis más firme indicaba que sufrió “una fuerte ráfaga de viento” que lo arrastró hacia la zona de la bahía de Samborombón, un lugar con bastante dificultad para realizar rastrillajes porque es fangoso, con características de cangrejal o marisma.
“Si hubiera bajado en algún punto se lo hubiera podido localizar de inmediato”, precisó en aquel entonces el gobernador bonaerense, Daniel Scioli.
Ferzola, de 51 años, tiene una amplia experiencia como piloto, ya que entre sus coberturas aparecen carreras de automovilismo desde el aire para un conocido programa de TV y traslado de actores y funcionarios.
La investigación está a cargo del fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta, al frente de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 5 de La Plata, pero hasta el momento el paradero de Ferzola es un gran misterio.