*Candela Casafu
Llegué al Centro Cultural de La Gloriosa en marzo de 2021 porque una de mis hermanas me llevó la info de que estaban anotando en los talleres. Empecé en el taller de foto y video, teníamos un grupo de Whatsapp donde habían mandado un mensaje que decía: «Hola chicas, el 24 de marzo Día de la Memoria vamos a pintar un mural, comer unas hamburguesas y después vamos todos juntos a la marcha».
Cuando llegamos a la concentración estaban todos cantando y lo que más me llamó la atención fue el agite y las canciones que, sin saberlas, me las aprendí al minuto cero. Después de todo eso llegué a mi casa, les conté a mi hermana y a mi mamá una situación que había pasado: a una de las chicas le lastimaron el brazo.
¿Vos vas a seguir yendo a ese lugar?, me dijeron y les respondí, sí porque me gustó pelear por mis derechos como hicieron los movimientos sociales en la última dictadura cívico-militar.
«Yo»
Vivo en el barrio La Lagunita desde que nací. Tengo 19 años y comparto mis días con mis hermanas, sobrinas y mi novio, al que conocí militando en La Gloriosa.
Cuando empecé en el Centro Cultural encontré gente nueva y me crucé con personas del barrio con quienes nunca había intercambiado saludo. Hice amistades con algunas cumpas.
Encontré un mundo nuevo en La Gloriosa, mi segunda casa. Una vez compartí mi historia a los chicos en la despedida de fin de año, en 2021. Pasé situaciones horribles en una relación tóxica que superé y me crecieron alas. Me sentí representada en lo que dice Eduardo Galeano en La Mujer Sin Miedo: «Hay criminales que proclaman tan campantes la maté porque era mía, así no más, como si fuera cosa de sentido común y justo de toda justicia y derecho de propiedad privada, que hace al hombre dueño de la mujer. Pero ninguno, ninguno, ni el más macho de los súper machos tiene la valentía de confesar la maté por miedo, porque al fin y al cabo el miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del hombre a la mujer sin miedo».
Ahora los llevo al principio de todo. Llegó el 2020, año de la pandemia. Mi familia aterrada por todo lo que estaba pasando decidió cuidarme tanto como ellos pudieran y prácticamente no salí.
El 2020 fue un año trágico para todos, pero el siguiente fue maravilloso. Empecé en La Gloriosa que me permitió volver a vivir la vida. Conocí muchas personas que me enseñaron cosas buenas y también pasaron cosas malas.
La Glo me enseñó a mejorar un montón. Hoy soy mejor que ayer y esa es una de las tantas cosas que aprendí, que la militancia te salva.
Un taller para conocernos
*Candela Casafu del Centro Cultural La Gloriosa, que integra el Movimiento Evita, participó del taller de comunicación dictado por la Cooperativa de Trabajo La Cigarra. La capacitación surgió tras la firma de un convenio con el programa Santa Fe Más, que depende del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia y llega a más de 26 mil jóvenes para brindarles herramientas para la inserción en el mundo del trabajo.
El desafío fue grande y se llevó a cabo en dos talleres de un encuentro semanal cada uno que tuvieron a personas de todas las edades, quienes fueron seleccionadas por haber transitado capacitaciones relacionadas a la comunicación y el periodismo en las organizaciones sociales de las que dependen.
Fueron tres meses por donde pasaron alumnas y alumnos de Radio Aire Libre, la Asociación Vecinal La Florida, La Poderosa, Radio Qom, el Centro Cultural Oveja Negra y el Centro Cultural La Gloriosa. Desde La Cigarra y con las periodistas del diario El Ciudadano, Silvina Tamous como coordinadora junto a Carina Ortiz y Negui Delbianco de talleristas, se pensó en brindar un acercamiento al periodismo y la comunicación institucional para que pudieran aplicarlo en cada una de las instituciones por las que transitan y se sienten parte.
Parece poco tiempo, pero cuando hay ganas todo se puede y logramos esa reciprocidad de conocimientos que nos da sabiduría. Como trabajo final hicieron textos que hablan de ellos y ellas, de sus miedos, de sus progresos, de su mirada de sus organizaciones y de sus barrios. Sus trabajos nos llenan de orgullo y por eso, los vamos a ir publicando tanto en la edición impresa como en la web del diario El Ciudadano. Esperamos que los disfruten.