Enviada especial de El Ciudadano a Australia y Nueva Zelanda
El combinado nacional se encuentra instalado en el barrio Ellerslie, a pocos kilómetros del centro de Auckland, para comenzar con el recorrido mundialista y estampar la primera “estrella” en el escudo. En esta oportunidad, la estrella, la Copa del Mundo, es ganar un partido y pasar de fase.
El seleccionado argentino femenino de fútbol tiene un recorrido muy distinto al del masculino y también diferentes aspiraciones. En esta novena edición de la Copa Mundial de la FIFA, el conjunto conducido por Germán Portanova tendrá su cuarta participación.
Después de competir en las ediciones 2003, 2007 y Francia 2019, el combinado nacional llega con otros aires. En primer lugar, el cambio más resonante entre esas selecciones y esta, tiene que ver con el nuevo cuerpo técnico. La renovación en ese puesto, tras la salida de Carlos Borrello, a cargo del plantel en las tres ediciones anteriores, y la asunción de Germán Portanova, ex DT de UAI Urquiza, se le suma el innegable apoyo, postergado durante mucho tiempo, que han recibido las futbolistas por parte de la Asociación del Fútbol Argentino. Desde poder entrenar en el predio Lionel Andrés Messi, contar con las herramientas necesarias para hacerlo, y fundamentalmente, la organización de diferentes giras amistosas para sumar rodaje internacional de cara a este Mundial.
Para meterse en Australia/Nueva Zelanda 2023, Argentina pudo evitar las instancias de repechaje para lograr el cupo mundialista tras quedar en la tercera posición en la Copa América, detrás de Brasil y Colombia, los otros dos equipos sudamericanos presentes en el Mundial 2023. El tercer cupo directo que consiguió la Selección es consecuencia de la decisión de que este Mundial sea el primero con 32 selecciones participantes, a diferencia de Francia 2019, que eran 24.
Con la propuesta de ser protagonistas y presentar un equipo competitivo, más allá de los rivales que se presenten, Portanova asumió como técnico en julio de 2021. El «Flaco» llegó a la Selección tras más de una década en el fútbol de UAI Urquiza, equipo con el que ganó tres campeonatos argentinos (2014, 2017/18 y 2018/19).
Portanova, quien se define como obsesivo del trabajo, al punto que mandó información de las italianas al grupo de WhatsApp que tiene la Selección en el último día del año pasado, se ganó la confianza de sus dirigidas, volvió a convocar a futbolistas fundamentales como Estefanía Banini y Florencia Bonsegundo, y sumó al plantel mundialista a muchas jugadoras que tendrán en Australia/Nueva Zelanda 2023 su primera Copa del Mundo.
En 2019, en tierras francesas, Argentina hizo historia: logró sumar sus primeros dos puntos en una cita mundialista. En Australia y Nueva Zelanda 2023, entre el 20 de julio y el 20 de agosto, Argentina buscará seguir por ese camino.
El camino mundialista
Quedar en la historia no será fácil, tampoco imposible. El grupo que le tocó a la Selección es el G y lo comparte con Italia, puesto 16 en el ranking mundial, Sudáfrica, vigente campeón de la Copa Africana 2022 (puesto 54) y Suecia, la figurita difícil de la zona, tercero en Francia 2013 y en la misma posición en el ranking de Fifa.
El primer partido, ante las italianas lo jugará en el estadio Eden Park, en Auckland, el lunes 24 a las 03. El segundo cruce, ante las sudafricanas será en Dunedin, el 28 a las 21 y el cierre de la fase de grupos en Hamilton, a pocos kilómetros de Auckland.
Las elegidas
Entre las futbolistas se destaca la presencia de dos jugadoras de Central. La histórica arquera Vanina Correa, quién jugará su cuarta Copa del Mundo y la delantera Érica Lonigro.
Correa, nacida en Villa Gobernador Gálvez, debutó en la Selección en el 2003 y encarará este año su último Mundial. Con la camiseta de la Selección Argentina, la arquera jugó en la Copa del Mundo de 2003, 2007 y 2019. Fue olímpica en 2008, campeona sudamericana en 2006 y medalla de plata en los Juegos Panamericanos Lima 2019.
Lonigro, en tanto, tendrá su primera experiencia mundialista en Oceanía. La delantera de Central debutó con la camiseta albiceleste en 2021, en un partido amistoso ante Brasil y su primera competencia oficial fue la Copa América 2022, certamen que le posibilitó al equipo de Portanova acceder de manera directa al Mundial de Australia/Nueva Zelanda 2023.
Ambas futbolistas militan actualmente en el campeonato local. En la lista de Portanova, son muchas las futbolistas convocadas juegan en Argentina: Lara Esponda (River); Abigail Chávez (Huracán); Julieta Cruz y Miriam Mayorga (Boca), Daiana Falfán y Romina Núñez (UAI); y Gabriela Chávez (Estudiantes BA).
Del exterior, en tanto, son 13. Adriana Sachs, Eliana Stabile, Paulina Gramaglia, Yamila Rodríguez y Lorena Benítez, todas jugando en Brasil. Chiara Singarella y Mariana Larroquette, recientemente anunciada como refuerzo del Orlando Pride, ambas en Estados Unidos. En Europa militan Aldana Cometti, Florencia Bonsegundo, Estefanía Banini y Dalila Ippolito. En Chile, Camila Gómez Ares y en México, Sophia Braun. Vanesa Santana, en tanto, figura como libre y hasta hace 2 meses en Sporting Huelva de España.
