Empujada por el precio récord en los mercados a futuro de Chicago, la soja gana terreno y desplaza otros cultivos. Los reportes de intención de siembra “siguen arrojando expectativas alcistas de superficie de soja de primera” en toda la región núcleo (que abarca gran parte de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y La Pampa), con un rango que va de 5 a 35 por ciento y un 20 por ciento de promedio, según informó la Bolsa de Comercio de Rosario.
El aumento esperado de superficie sembrada con soja “se debe fundamentalmente a la caída en la intención de siembra de gramíneas”, explicó la entidad por medio de su Guía Estratégica para el Agro (GEA).
Esa reducción sería no menor al 40 por ciento para el trigo y al 35 por ciento para el maíz, durante el ciclo 2012/13. Para este último cereal, la demanda de semilla e insumos en pre-cosecha “continúa siendo escasa, afectada por la baja rentabilidad del maíz en campos alquilados y los elevados costos de producción en los campos propios, como también por la falta de financiación para afrontar los costos del cultivo”.
A esto, añadió la GEA, “se le suma el encarecimiento de alquileres, de la mano de las subas en el precio de la soja, y la falta de fluidez en la comercialización de los cereales de cosechas anteriores”.
Con respecto al cultivo de trigo, el informe consignó que la mayoría de los lotes “están muy bien implantados y en buenas condiciones”.
El análisis agregó que las escasas precipitaciones y las muy bajas temperaturas revirtieron el cuadro anterior, que venía favoreciendo el desarrollo radicular. “Se reportaron daños por frío en las puntas de las hojas, pero sin provocar muerte de plántulas”, indicó la GEA. El informe concluyó que los lotes sembrados temprano o con ciclos largos están comenzando la etapa de macollaje.