La cosecha de trigo en el centro y norte de la provincia de Santa Fe concluyó esta semana con una producción total de 810.578 toneladas y un rendimiento promedio de 19,5 quintales por hectárea, lo que representa una merma de 1,5 quintales respecto de la campaña anterior, informaron este jueves voceros del sector.
El informe semanal que elaboran la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Ministerio de la Producción provincial explica que esa disminución se debió a las escasas lluvias registradas en las épocas de floración y fructificación de las plantas.
El trabajo explica que en esta campaña hubo mayor superficie sembrada y cosechada, con “buena disponibilidad de agua útil en el período de implantación, temperaturas adecuadas, humedad en los perfiles de los suelos que permitieron el desarrollo con cierta homogeneidad hasta el final del estado de macollage”.
No obstante, luego «las escasas y muy variables lluvias, que no se produjeron en las etapas de floración y fructificación, impactaron en los irregulares rendimientos promedio”.
El informe precisó que la superficie sembrada alcanzó las 436.500 hectáreas, de las cuales se cosecharon 415.750, que arrojaron un promedio de producción de 19,5 quintales por hectárea.
Las 810.578 toneladas cosechadas quedó muy por debajo de la campaña 2021, cuando se obtuvo el récord para la región con 1.381.430 toneladas.
En cuanto al resto de las actividades agrícolas del distrito, estuvieron condicionadas por las intensas lluvias registradas hasta el lunes, con registros muy importantes en todos los departamentos.
El más afectado fue General Obligado, donde cayeron entre 105 y 361 milímetros, dependiendo de la zona, y con la particularidad que en Villa Ocampo precipitaron 320 milímetros en un solo evento.
