Search

Condenado a 17 años por un homicidio tras una fiesta

A tres años del crimen de Rodrigo Molina la Justicia provincial condenó a un muchacho apodado Ojón a 17 años de prisión. El crimen ocurrió en un pasillo del barrio Avellaneda Oeste, a metros de Villa Banana. Rodrigo tenía 25 años y junto a su primo Wilfredo fueron las primeras víctimas de la banda de Pandu.

La madrugada del 8 de junio de 2014, Rodrigo estuvo en un cumpleaños donde también fue invitado el acusado, un ayudante de albañil llamado Nicolás “Ojón” Barrios, de 22 años. Los jóvenes ya habían mantenido algunas discusiones y esa noche no fue la excepción. Apenas Ojón se cruzó con Rodrigo empezaron a insultarse. La fiesta estuvo tranquila, pero a la salida hubo una emboscada en un pasillo de Amenábar y Lima. Rodrigo estaba con dos amigos cuando Ojón y Francisco M. le cortaron el paso y le dispararon. El muchacho recibió un tiro en el tórax y su amigo Gastón L. sufrió lesiones. Ambos fueron trasladados al Hospital Carrasco. Molina llegó sin vida por una hemorragia masiva.

Barrios fue detenido el 18 de marzo de 2015. El juicio oral empezó hace dos semanas y el fiscal Miguel Moreno pidió 18 años de prisión para el acusado en los alegatos de apertura, mientras que el abogado defensor Marcelo Argenti solicitó la absolución.

Tras escuchar los argumentos, el tribunal, compuesto por Juan Carlos Curto, Delia Paleari y Rodolfo Zvala, resolvió condenar a Ojón a 17 años de prisión al encontrarlo culpable del delito de homicidio agravado por uso de arma de fuego, portación ilegítima y abuso de armas. Los fundamentos se presentarán a partir de la semana próxima, explicaron los voceros judiciales.

El crimen de su primo

Wilfredo Molina tenía 23 años y fue asesinado la tarde del 29 de diciembre de 2015 en pasaje 1112 al 3100, de la zona oeste. Wilfredo estaba con amigos en la vereda cuando aparecieron dos motos con cuatro jóvenes conocidos en el barrio por ser integrantes de la banda de Pandu. Los acompañantes abrieron fuego. Uno de los plomos hizo blanco en la cabeza de Wilfredo y Dylan, un adolescente de 14 años, recibió dos disparos en el abdomen. Las víctimas fueron trasladadas por un vecino al hospital Carrasco. Wilfredo murió poco después de ingresar, mientras que Dylan fue derivado al Hospital de Niños Víctor J. Vilela.

Ese día los testigos no demoraron en señalar a los atacantes como integrantes de la banda de Pandu como se lo conoce a Nelson Aguirre, de 37 años. Pandu fue condenado en un juicio abreviado a principios de este mes a 16 años de prisión por el homicidio de Javier Barquilla, ocurrido en febrero de 2015, y tres violentos robos. El hombre se mudó de barrio Las Flores a la zona oeste en 2014 y comenzó con la venta al menudeo de estupefacientes.

Los vecinos dijeron que en la moto estaban Muqueño y Wititi, con otras dos  personas, todas de la banda del Pandu.

No pasó mucho tiempo hasta que la Policía detuvo en Lima y Rueda a Muqueño. Martín Lucas G., de 18 años, ya tenía el pedido de captura como autor del crimen de Wilfredo y quedó a disposición de la fiscal de Homicidios Dolosos Marisol Fabbro. Y un año atrás, Muqueño también había sido imputado por el crimen de Juan Carlos Sánchez, baleado el 11 de noviembre de 2015 en Rueda al 4300. También fue señalado como autor del crimen de Nicolás Mamani, de 17 años, ocurrido en enero de 2016 cerca de su casa en Manantiales al 3100.

Por su parte, Gustavo B., apodado Wititi, no quedó imputado por el crimen de Wilfredo pero firmó un abreviado a tres años de prisión por amenazas tras el asesinato de Barquilla. En febrero de 2016, Wititi fue detenido otra vez por el abuso sexual y asesinato de Guadalupe Medina, de 12 años, ocurrido en mayo de ese año en Villa Banana. En esta causa, también están detenidos Mauricio “Chueco” C. y un adolescente de 16 años a quien la familia de la víctima insistió en que era un perejil para desviar la atención de la banda de Pandu.

10