Jonatan “Jona” Riquelme, quien estaba preso, aceptó este martes una condena de 8 años de prisión por ser el organizador de una célula narco que operaba para Esteban Lindor Alvarado, uno de los capos criminales más importantes de la región. El acuerdo de juicio abreviado fue homologado por el juez Mariano Aliau.
De acuerdo con la Fiscalía, Riquelme —conocido por varios apodos como «Tona» o «Gato»— dirigía, junto a su hermano Francisco (también preso), la venta de drogas en barrios como Industrial, Empalme Graneros y Ludueña.
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La banda mantuvo el control del territorio hasta julio de 2021, cuando una célula de Los Monos irrumpió en la escena, desatando una violenta disputa. Riquelme está sindicado como el coordinador de los delitos de la organización, que cuenta con 26 integrantes, y se le atribuyen balaceras cometidas por él mismo, incluyendo un ataque en abril de 2022 contra la vivienda de un joven que, supuestamente, se había cambiado de bando.
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Paralelamente, Jonatan Riquelme enfrenta otra causa judicial con una pena en expectativa mucho más alta: se lo acusa de haber planificado el asesinato de Alan Agustín Toledo Ferrari, de 19 años. El joven fue encontrado sin vida con las manos atadas y cuatro disparos en agosto de 2022 en el barrio Ludueña.
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