La banda de Los Lagartos, conocida de esa manera por el apodo del padre del líder de la organización, fue condenada por la Justicia federal de Rosario en un procedimiento abreviado que incluyó penas para cinco personas, entre ellas un chofer de la Gobernación de Entre Ríos en la gestión de Sergio Urribarri. Fueron sentenciados a montos que van de los 6 a los 10 años por comercializar estupefacientes en distintos lugares del país y, en el caso del chofer, de transportar 20 kilos de cocaína que fueron incautadas en la autopista Brigadier López en 2014.
El Tribunal Oral Federal Número (TOF) 2 de Rosario, integrado por Beatriz Caballero de Barabani, Omar Digerónimo y Otmar Paulucci, validó este jueves el acuerdo al que arribaron fiscales y defensores de los cinco imputados.
Víctor Fabián Grgicevic, alias Narigón, fue considerado jefe de una organización delictiva destinada a comercializar drogas y como tal acordó una década de cárcel, mientras que su padre, Víctor Hugo Grgicevic, un ex convicto por narcotráfico conocido como Lagarto, recibió seis años y diez meses de cárcel como financista de la organización.
Marcelo Alejandro Acosta (de 52 años y chofer en aquella época de Sergio Urribarri), aceptó su responsabilidad en el transporte de 20 kilos de cocaína en 2014 y recibió seis años de cárcel, además de una multa de cinco mil pesos. Emilio Refour y su pareja, Constanza Melisa Baldi, también fueron penados, con el mismo monto en el caso del primero y a tres años y once meses la segunda.
Acosta fue detenido el 13 de mayo de 2014, cuando circulaba en un Peugeot 307 por la autopista a Santa Fe, a la altura de San Lorenzo. En el procedimiento, a cargo entonces de la Justicia federal de Misiones, se encontró un bolso negro que contenía veinte envoltorios de cocaína de máxima pureza, que pesaron unos 20 kilos, y que tenían en bajo relieve dos sellos con imágenes similares a la gráfica de Playboy.
El auto interceptado fue el mismo que había utilizado días antes Gonzalo Caudana, acusado de ser uno de los jefes del narcotráfico de la capital entrerriana, Paraná, detenido en la Unidad Penal N°1 de la capital provincial y vinculado con la banda de Los Monos.
Acosta viajaba solo pero había otros dos vehículos que lo secundaban, cuyos tripulantes iban alertando sobre posibles controles o presencia policial. A bordo de un Peugeot 307 iban Refour y Baldi, mientras que en un Volkwagen Bora se trasladaba el Narigón Grgicevic.
La investigación se inició en 2009, como derivación de una pesquisa que se centraba en las operaciones que llevaba a cabo Slawomir Andrej Polus, un ciudadano polaco apodado Francés y ex convicto por narcotráfico que vivía un tiempo en Misiones, a la vera del río Paraná, y otro tiempo en Granadero Baigorria. Al ser detenido de nuevo en marzo de 2013, el entonces secretario de Seguridad lo mentó como Rey de la Marihuana.
El Lagarto
Lagarto Grgicevic ya había sido condenado en 2000 a cuatro años de prisión por el Tribunal Federal Nº 1 de Rosario, en una causa por tenencia por comercialización originada un año antes. Su nombre volvió a sonar en agosto de 2011, cuando efectivos de la subcomisaría 20ª que respondieron al disparo de una alarma hallaron en un galpón de Caupolicán al 300, en el sur de Rosario, 250 kilos de marihuana. En un utilitario Chevrolet que estaba en el lugar había un formulario del colegio de mandatarios A y B a nombre de Grgicevic. Tres años después las cuatro personas detenidas en ese galpón fueron condenadas a penas de entre 4 y 6 años de prisión, tras un juicio oral en el apareció el nombre del Lagarto, ya que era quien contrató la alarma que permitió descubrir el depósito de marihuana.
En 2014, la Policía provincial irrumpió en el mismo galpón y detuvo a un muchacho con dos armas en su poder. En los fondos, encontraron un taxi Renault Logan con documentación en regla a nombre de Luis Alberto Paz, el ex mánager de box que era padre de Martín, alias Fantasma, quien había sido asesinado dos años antes.