Tres ciudadanos argentinos recibieron penas de hasta cinco años y ocho meses de prisión tras ser detenidos el viernes pasado en el departamento uruguayo de San José, cuando circulaban en dos automóviles con 33 kilogramos de cocaína y una sustancia similar al fentanilo, informó hoy el Ministerio del Interior de ese país.
Se trata de tres hombres de 41, 47 y 53 años, quienes en una audiencia de formalización realizada en las últimas horas fueron considerados autores de un «delito continuado de importación y transporte de sustancias estupefacientes agravado en reiteración real con la asociación para delinquir» y «un desacato agravado».
De acuerdo a lo informado por el Ministerio del Interior de la República Oriental del Uruguay, los imputados recibieron penas de cuatro, cinco y cinco años y ocho meses de cárcel.
Todo comenzó el 5 de enero último, cuando la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas (Dgrtid) fue alertada por el Departamento de Registro Antecedentes y Estadística acerca del movimiento migratorio de dos vehículos procedentes de Argentina que eran monitoreados por su vínculo a un secuestro de drogas ocurrido en enero del año pasado.
Asimismo, los investigadores establecieron que a lo largo de 2023 los autos señalados tuvieron patrones de movimientos similares a los que transportan estupefacientes desde Argentina hacia Uruguay.
Por este motivo, se dio inicio al operativo «Cleón» y, en coordinación con la Dirección Nacional de Policía Caminera y Brigada Departamental Antidrogas de San José, se implementaron puestos de vigilancia, seguimiento y control en puntos estratégicos y posibles vías de escape.
En esas circunstancias, mientras se aproximaban a uno de los controles, los sospechosos realizaron una maniobra evasiva en «U», en la ruta 1, y retomaron el camino hacia la ciudad de Colonia.
Minutos después ambos rodados se detuvieron en la banquina de la ruta y los conductores se pusieron en contacto, momento en el que los policías intentaron interceptarlos y les impartieron la voz de «alto».
A raíz de ello, los sospechosos se dieron a la fuga y se inició una persecución que se extendió por algunos kilómetros, hasta que finalmente se logró detener al conductor de un Toyota Cramy.
Dentro del rodado, los agentes hallaron escondidos 31 ladrillos con 33 kilogramos de cocaína y tres envoltorios, uno de los cuales contenía una sustancia similar al fentanilo.
Mientras que, al continuar la persecución por unos 20 kilómetros, los uniformados hallaron el segundo vehículo abandonado en un camino próximo a la localidad de Rincón del Pino, y al rastrillar un monte, a unos 500 metros del lugar, detuvieron a sus dos ocupantes.