El Tribunal Oral Federal Nº 3 de Rosario condenó este viernes a Fabricio Lorincz y Yanina Alvarado, cuñado y hermana de Esteban Alvarado –el hombre condenado por robo de autos de alta gama que fue imputado como instigador de la ejecución del prestamista Lucio Maldonado– a la pena de 9 y 7 años de prisión, respectivamente, por el delito de tráfico de estupefacientes agravado por la intervención de tres o más personas.
A la vez, el TOF3 remitió el pedido de la Fiscalía y de la defensa de Lorincz y Alvarado al Juzgado Federal Nº 3 para que se investigue la desaparición del kilo y medio de cocaína y los 1.700 dosis en troqueles de LSD secuestrados en la vivienda de Miguel Lotufo, quien estaba sindicado como el encargado de las drogas sintéticas en la banda investigada. La lectura de los fundamentos se realizará el 29 de marzo a las 15 en los Tribunales Federales de Rosario, ubicados en bulevar Oroño al 900.
En esta jornada también recibieron condena los otros siete acusados por el mismo delito que la pareja con diferentes niveles de responsabilidad en la banda que, por un lado, se dedicaba a la venta de drogas sintéticas, y por el otro comercializaba marihuana y cocaína, en las ciudades de Rosario, Roldán y Carcarañá.
En ese marco, los magistrados del TOF3 –Eugenio Martínez Ferrero (presidencia), Osvaldo Facciano y Ricardo Vázquez– resolvieron condenar a Gustavo Ariel Ramírez a 8 años y a Miguel Ángel Lotufo a 6 y medio. Además, Natalia Scarcelo, Mario Salgado y Sergio Tesán recibieron la pena de 6 años mientras que para Yamil Yadu resolvieron 4 años de prisión, y 2 años de prisión condicional le dieron Leonel Demetrio.
El fiscal general de juicio, Federico Reynares Solari, se mostró conforme con el veredicto de los jueces. “El tribunal concordó con el pedido de pena que realizamos desde la Fiscalía y señaló que al único que le disminuyeron la pena, ya que habíamos solicitado 10 años, fue a Lorincz, ya que le retiraron la figura de organizador”, dijo para agregar que, “si bien Alvarado tenía intervenciones menos relevantes, trabajaba con Lorincz”.
Por su parte, la defensa de Yanina Alvarado y Fabricio Lorincz, representada por el penalista Fernando Arias Caamaño, indicó que esperarán los fundamentos para apelar la sentencia. “Logramos probar que Lorincz no era organizador. Ahora nos queda recurrir el resto a la Cámara de Casación para que sea, en definitiva, la que aclare las circunstancias y estoy confiado de que nos van a dar la razón”, dijo Arias Caamaño.
Además de remitir las actuaciones para que se investigue la desaparición de la droga secuestrada en la casa de Lotufo, el tribunal también puso a disposición del fiscal general la totalidad de las actuaciones y los respaldos digitales de la causa para que analice si es pertinente investigar a «los hermanos Villalba” como quienes se dedicaban a comercializar estupefacientes en la zona noroeste y barrio Tango.
La causa y la desaparición de droga
La investigación comenzó a finales de 2013, como desprendimiento de una causa anterior donde los investigadores de la Brigada Antinarcóticos provincial y de la Policía Federal interceptaron comunicaciones de un distribuidor de esta banda que tenía dos ramas.
Por un lado, vendían marihuana y cocaína en Rosario, Roldán y Carcarañá y, por el otro, estaba la comercialización de drogas de sintéticas (LSD, éxtasis y ketamina) junto con los otros estupefacientes.
Al comienzo del expediente, como organizadores de la rama de la marihuana y la cocaína estaban Lorincz, 35, y Ramírez, de 45. Y las drogas sintéticas estaban a cargo de Lotufo, 33 años.
Por ello, la acusación que pesaba para los tres hombres estaba agravada por la figura de organizadores de la banda que se dedicaban a vender en sus domicilios como también de concretar transacciones bajo la modalidad de delivery.
En el juicio, el carácter de organizador sólo se mantuvo para Lorincz hasta este viernes, cuando se conoció el veredicto del TOF3 a través del cual los magistrados le sacaron ese agravante y bajaron un año la pena solicitada por el fiscal general de juicio.
La pesquisa duró un año y el 20 de diciembre de 2014 el juez Carlos Vera Barros firmó 25 órdenes de allanamiento solicitadas por el entonces fiscal Mario Gambacorta, que se realizaron en simultáneo en la ciudad, Roldán y Carcarañá; incautaron poco más de dos kilos de cocaína, unos diez kilos de marihuana, algunas pastillas de éxtasis, 1.700 dosis de LSD y también elementos de corte.
De este secuestro, en los alegatos tanto de la Fiscalía como de la defensa de Alvarado y Lorincz, se conoció que habían desaparecido en la etapa de primera instancia el kilo y medio de cocaína, los troqueles de LSD, los celulares y la documentación incautada en la vivienda de Moreno al 2800 perteneciente a Lotufo.
Esto hizo que la Fiscalía, al no poder probar la calidad del estupefaciente secuestrado ya que no estuvo disponible para hacerle los peritajes, disminuyera el pedido de pena para Lotufo.
Los roles
De acuerdo con la acusación, la organización estaba integrada por los imputados Lorincz, Ramírez, Alvarado, Scarcelo, Ariel Gaeta (prófugo) y Tesán. Ramírez comercializaba cocaína y marihuana tanto en Rosario como en Roldán y Carcarañá. Lo hacía en los domicilios donde pasaba la noche y también trasladaba las sustancias a pedido y por medio de distribuidores como Yamil Yadu, de 26, quien fue apresado en una vivienda de Carcarañá, donde las fuerzas federales irrumpieron en busca de su padre Eduardo “Negro” Yadu, quien también se encuentra prófugo en la causa.
“Lorincz llevaba adelante las actividades con su pareja Yanina Alvarado, de 37, dando indicaciones a su consorte procesal Natalia Scarcelo, de 45, la cual estaba al frente de un lugar de venta de material estupefaciente en una de las viviendas Fonavi delimitadas por avenida 25 de Mayo, Donado, Chubut y Forest”, en el llamado Fonavi Supercemento, según se indica en el expediente.
Lotufo también estaba en las actividades de distribución y venta de las drogas sintéticas con Demetrio, de 29, y Salgado, de 25, indicó la Fiscalía.
