Tania Rostro, de 26 años, fue condenada este jueves en un juicio abreviado por ser la jefa de una banda dedicada a múltiples delitos que tenía como objetivo de liderar el territorio en los barrios Parque Casas, Nuevo Alberdi y Cristalería para el narcomenudeo bajo la protección de la banda de Los Monos.
La joven fue penada con 6 años y 8 meses de prisión este jueves, sentencia que se unificó en 16 años de cárcel por dos condenas anteriores en el fuero federal y una multa de 685 mil pesos.
El acuerdo presentado por la fiscal Valeria Haurigot y los abogados Juan Pablo Audisio y Lucas Peirone también fue firmado por su madre, María Beatriz Gunsett, de 59 años, quien recibió una condena de 3 años de prisión efectiva que cumplirá bajo la modalidad domiciliaria como integrante de la asociación ilícita regenteada por su hija.
La audiencia estuvo presidida por la jueza Hebe Marcogliese, quien homologó los acuerdos pero remarcó que en relación a Tania la pena luce “insuficiente o no adecuada a las diversas características de los hechos y de su autor, de acuerdo a la valoración jurídico social del delito”. La Fiscalía brindó los argumentos del monto de la pena elegido teniendo en cuenta factores sociales y ambientales y finalmente el abreviado fue aprobado.
Tania, la jefa
En 2018, la Fiscalía federal comenzó a investigar a una banda que se dedicada al narcomenudeo con base en los barrios Parque Casas, Nuevo Alberdi y Cristalería. En abril de 2019, la Fiscalía provincial hizo foco, pero por balaceras y usurpaciones, en ese mismo sector de la zona norte.
Tras 34 allanamientos detuvieron a integrantes de la narcobanda comandada por la ya célebre Tania
Cada una de las pesquisas sindicó a Tania Rostro, entonces de 22 años, como quien llevaba adelante la administración de la banda junto con su madre, hermanos y otros familiares.
Las medidas investigativas siguieron su curso hasta el sábado 11 de julio de 2020, cuando se produjeron 34 allanamientos ordenados por la Justicia federal y provincial, donde uniformados incautaron dinero, elementos informáticos, un arma, vehículos, chalecos antibalas y drogas.
La joven estaba señalada en las pesquisas como ex subordinada y luego antagonista de Emanuel “Ema Pimpi” Sandoval, condenado por instigar la balacera contra la casa del ex gobernador Antonio Bonfatti y acribillado en octubre de 2019 en una casona de La Florida.
La fiscal Haurigot la imputó el 15 de julio de 2020 junto con su madre Mari Gunsett, su amiga Sharon L., su cuñado Jorge Cóceres y la empleada municipal Carolina A. por integrar una asociación ilícita dedicada a múltiples delitos que funcionó desde abril de 2019. A la joven le recayó la figura de ser la líder e instigar una privación de la libertad para hacer firmar a la víctima formularios 08, boletos de compra venta, amenazas, dos balaceras y una usurpación.
En la acusación, Haurigot ubicó a Sharon L. como la lugarteniente de Tania, quien ocupó ese rol luego del asesinato de Daiana Paiva cometido el 10 de febrero de 2020 en Olivé al 1900. A tres horas de ese crimen, fue ejecutada Agustina Thomson en barrio La Florida, en lo que fue interpretado como una represalia ordenada por Tania.
Thomson, dijo la fiscal, estaba en pareja con uno de sus rivales, Marcelo “Coto” Medrano, barrabrava de Newell´s y narco de la zona norte, quien sería asesinado en septiembre de 2020 en Granadero Baigorria.
La jefa: acusaron a Tania Rostro de ordenar ataques a tiros y usurpaciones en la zona norte
El juez Florentino Malaponte le dictó tras la imputación la prisión efectiva por el plazo de ley, igual que su cuñado, por ser sindicado como tiratiros de la banda. En tanto para Sharon, la madre de Tania y la empleada municipal ordenó la libertad con restricciones.
María Beatriz, quien es conocida en Cristalería por regentear un comedor comunitario, fue acusada como miembro de la organización: «gestiona la información valiéndose de su rol de referente social y barrial cultivando vínculos que aportan información para que la asociación pueda abstraerse del accionar de la Justicia”, explicó la Fiscalía en dicha oportunidad.
Y a la empleada de Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat de la Municipalidad de Rosario Carolina A. la señalaron como quien le reveló a María Beatriz, el 10 de junio de 2020, que se realizarían actos de intervención con relevancia jurídica en Nuevo Alberdi, “a fines de que esta anoticiara a Tania, para que tomara las precauciones para eludir la acción de la Justicia”, según detalló en la acusación.
“Así la imputada reveló información reservada y protegida por secreto oficial”, siguió Haurigot para acusar a Carolina A. por violación de secreto oficial e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Aprietes armados, usurpación y un secuestro
En el acuerdo presentado para el juicio abreviado, la Fiscalía le achacó a Tania graves delitos que fueron desde tenencia de armas de fuego, amenazas, balaceras, usurpación hasta una privación de la libertad para que la víctima les entregara un vehículos, una moto y demás pertenencias.
El primero de los delitos se cometió el 22 de marzo de 2019 alrededor de las 18 cuando Tania se presentó en la casa de un hombre, ubicada en Martínez de Estrada al 7600. La víctima la conocía y por eso cuando le pidió que la acompañara a comprar un mueble no sospechó nada.
La situación cambió a las cinco cuadras, en Schweitzer y Mandisovi, cuando al auto de la joven se subieron tres varones armados y comenzaron a golpearlo. Luego lo llevaron a la casa de Tania de pasaje 1379 al 3800 donde le siguieron pegando y bajo amenazas de muerte que incluían a su familia, le hicieron firmar formularios 08 y boletos de compra venta en blanco.
Pasaron tres horas y cerca de las 21, lo dejaron en su casa sin antes golpear a su pareja para hacerla firmar otro 08 y sustraerle la documentación de su Gold Trend, de una moto Zanella, un auto a batería réplica Fiat 500, un cuatriciclo a batería y una cachorra de raza bulldog francés. Como si esto fuera poco, a la semana lo volvieron y lo llevaron para que retirar su vehículo del taller mecánico. Todos estos elementos fueron secuestrados en los allanamientos donde también le incautaron una pistola calibre 40 en la casa materna de Lorenzo Batlle al 4200 y un revólver calibre 22 en su domicilio de 1379 al 3800, describieron los voceros judiciales.
El otro hecho que se le imputa fue que ordenó un ataque a tiros cometido el 2 de diciembre de 2019 contra una vivienda de pasaje 1381 al 1800, en barrio El Churrasco, y tenía como objetivo que el propietario abandonara el domicilio.
A metros de ese lugar, el 9 de diciembre de ese año, había sido asesinado Sergio “Tabita” Barquero, de 25 años, en pasaje 1373 y calle 1389. Por este crimen fueron condenados en otro abreviado, de octubre de 2022, cuatro jóvenes que fueron sindicados como soldaditos de Tania a penas de 20 a 24 años prisión.
La otra balacera que le atribuyeron instigar a la muchacha fue la tarde del 13 de enero de 2020 y la perpetró su cuñado José Cóceres, quien junto con otra persona no identificada tirotearon el frente de una vivienda de Ávalos y Larrechea con el objetivo de intimidar a Alejandra P,, una joven con quien mantiene una enemistada, siempre según la acusación.
El ataque le provocó un roce en un ojo al hijo de Alejandra. Por este hecho se le atribuyó a Tania abuso de arma, lo mismo para su cuñado. En marzo de 2021, Cóceres, de 42 años, aceptó su responsabilidad en el tiroteo y como miembro de la asociación ilícita: fue penado a tres años de cárcel en un juicio abreviado.
En tanto, la usurpación se produjo en marzo de 2020 en Cullen y Ugarte entre Polledo y calle 1379; “Instigó en forma directa a los llamados Samuel y Budi, quienes se hicieron presentes y despojaron del inmueble a la moradora y a sus familiares”.
La joven que sufrió la usurpación debió alojarse en un hotel cuya estadía fue subsidiada por el municipio. Según la fiscal, en abril cuando la chica quiso volver Budi y Samuel le advirtieron: “Nosotros somos los sicarios de la Tania Rostro. Andate de acá porque te vamos a matar, como lo hicimos con la familia de Empalme. Ni se te ocurra denunciarnos porque te vamos a matar a vos y a tus hijas”. Por este hecho, Haurigot le imputó a Tania usurpación y amenazas coactivas.
Las condenas con llamado de atención
La magistrada Hebe Marcogliese presidió la audiencia de este jueves y decidió avalar el acuerdo presentado entre la Fiscalía y los abogados defensores Juan Pablo Audisio y Lucas Peirone, en representación de madre e hija, con algunos reparos sobre el monto de pena aceptada por la joven.
Para la magistrada, la condena acordada para Tania de 6 años y 8 meses de prisión por responsabilizarse de los delitos de privación ilegal de la libertad calificada por la violencia y amenazas; robo calificado por el uso de arma y por haber sido cometido en poblado y en banda; tenencia ilegítima de arma de fuego de guerra y de uso civil; la instigación de abuso de armas y de las amenazas coactivas agravadas por el uso de arma de fuego, por tener como propósito compeler al abandono del lugar de residencia habitual y la jefatura de una asociación ilícita, “no resulta proporcional al mínimo previsto”.
Marcogliese hizo esta salvedad teniendo en cuenta las dos condenas dictadas por la Justicia federal por comercialización de estupefacientes. “Tampoco se ponderó la dimensión del daño, habida cuenta de la pluralidad de víctimas, entre las que se incluye un inocente niño de 6 años que resultó lesionado. No se evaluó que en todos los hechos se utilizaron armas de fuego como elemento de intimidación”, fueron algunas de las argumentaciones de la jueza.
También indicó que “la única circunstancia que puede aparecer como atenuante es la corta edad de la acusada y lo desaconsejable que puede resultar una prisión alongada. No obstante este único parámetro, contrastado con el peso de las circunstancias agravantes, no tiene la suficiente entidad como para considerar la aplicación de la pena mínima prevista. Teniendo ello en cuenta, la pena individualizada y determinada por el órgano acusador, y aceptada por la defensa y la imputada, aparecen insuficiente o no adecuada a las diversas características de los hechos y de su autor, de acuerdo a la valoración jurídico social del delito”, resaltó.
Sin embargo, aclaró que “debe dejarse expresa constancia que el Tribunal carece de facultades para pronunciarse al respecto para luego dictar 16 años de prisión efectiva a Tania Rostro y la multa de 685 mil pesos, tras unificar con los 11 años de cárcel dictados por un tribunal oral federal 4 el 6 de septiembre de 2022.
La Fiscalía fundamentó el acuerdo en que Tania es una joven de 26 años, que tiene una hija menor de edad cuyo padre falleció tras un siniestro vial y que al momento de ser detenida no había sido condenada por la Justicia federal, ya que la primera sentencia se dictó el 27 de octubre de 2021.
“Los hechos imputados conllevan instigaciones a cometer delitos en los que la misma no toma parte en forma material. No se desconoce la gravedad de los mismos, pero analizando la respuesta final consideramos que corresponde la unificación propuesta”, argumentó la acusación.
Para María Beatriz Gunsett, la magistrada dictó la pena de 3 años de prisión efectiva morigerada en domiciliaria por tener a su cargo un hijo con problemas de salud y discapacidad por considerarla miembro de la asociación ilícita.
En el federal
Piden llevar a juicio a 23 personas involucradas en dos organizaciones dedicadas a la venta de droga
Tras los 34 allanamientos de julio de 2020 que llevaron a la detención de Tania Rostro y María Beatriz Gunsett en una casa de barrio Nuevo Alberdi, la Fiscalía federal fue la primera en indagar a madre e hija junto con la sindicada mano derecha de la joven Sharon L., por tráfico de estupefacientes en la modalidad de comercio, agravado por la intervención de tres o más personas organizadas.
El rol de Tania fue de organizadora mientras que su madre, partícipe secundario. En diciembre de ese año, la fiscal federal Adriana Saccone pidió la elevación a juicio por esta causa donde explicó que la gavilla de Tania respondía y operaba en el territorio bajo la protección del líder de Los Monos, Ariel “Guille” Cantero.
En esta causa fue condenada el 27 de octubre de 2021 por la Justicia federal a 8 años de prisión y a su madre le impusieron la pena de tres años de prisión. A su vez, al año siguiente sumó otra sentencia, también a 8 años y por el mismo delito, en el fuero federal. Así para esta fecha a Tania se le unificó la pena de 11 años de prisión. Que ahora sumaron poco más de un lustro de cárcel.