Tres policías fueron condenados por haber cometido apremios ilegales en perjuicio de un hombre en la localidad de Colonia Francesa (departamento San Javier). Se les impusieron tres años de prisión de cumplimiento efectivo para cada uno e inhabilitaciones por seis años.
Uno de los condenados es Cantalicio Gustavo Javier Franco, a quien se le ordenó entregarle 12 millones de pesos a la víctima como reparación del daño causado. Ese uniformado además recibió la pena por haber abusado de sus funciones públicas en otra oportunidad. Los otros dos coautores de los apremios ilegales son José Carlos Yalasi y Cristian Gauna.
La sentencia fue dispuesta por el juez Nicolás Falkenberg, en el marco de un juicio en el que se abreviaron los procedimientos que se desarrolló en los tribunales de la ciudad de Santa Fe.
El fiscal Ezequiel Hernández llevó adelante la investigación penal y es quien representó al MPA ante el magistrado.
Escopeta y puntapiés
Hernández señaló que “minutos después de las 20:00 del domingo 15 de septiembre del año pasado, los condenados concretaron su accionar delictivo mientras cumplían funciones en el Destacamento número 6 de Colonia Francesa”.
Especificó que “en las inmediaciones de una escuela, los policías utilizaron la culata de una escopeta para golpear a un hombre en el estómago”, y remarcó que “lo hicieron caer al suelo y, una vez allí, le dieron puntapiés en el abdomen para provocarle un daño mayor”. Al respecto, mencionó que “durante la agresión, los uniformados interrogaban a la víctima con la intención de que les dijera dónde estaba un bolso que había sido sustraído”.
Asimismo, afirmó que “el hombre atacado resultó herido y fue trasladado al hospital Cullen de la ciudad de Santa Fe, donde debieron practicarle una cirugía intestinal a raíz del grave cuadro de salud con el que llegó”.
En tanto, expuso que “para ocultar el accionar ilícito, Franco y Gauna insertaron declaraciones falsas en el libro de guardia del destacamento”.
Esposas
El fiscal indicó que “el viernes 8 de marzo del año pasado a la tarde, el imputado agredió a otro hombre en el rostro, le colocó esposas, lo privó ilegítimamente de su libertad y lo pateó en diferentes partes del cuerpo”.
“Como consecuencia del ilícito, la víctima sufrió múltiples heridas y recibió atención médica en el SAMCo de San Javier, donde el policía la amedrentó para que no contara nada sobre lo sucedido”, relató Hernández. “Con el fin de procurar su impunidad, le dijo que tenía contactos ‘para hacerle perder su trabajo’ si alguien se enteraba de la golpiza”, detalló.
Por otro lado, el fiscal manifestó que “un subinspector de policía, cuyas iniciales son EP y está imputado en el marco del legajo, fue testigo de las conductas delictivas y no hizo nada para detenerlas ni denunció a su compañero”.
Finalmente, planteó que “junto con el uniformado que vio lo que había ocurrido, Franco falsificó un acta de procedimiento para desvincularse de la situación violenta”.
Calificación penal
Los tres policías que agredieron a un hombre en inmediaciones de una escuela fueron condenados por la coautoría de apremios ilegales calificados (por haber provocado un grave daño a la salud de la víctima). A su vez, Franco y Gauna son coautores de falsedad ideológica en instrumento público.
Por su parte, Franco además fue condenado como autor de vejaciones y como coautor de privación ilegal de la libertad por abuso funcional y falsedad ideológica en instrumento público.
