Un joven de 22 años que estaba cerca de cumplir una condena por homicidio en la cárcel santafesina de Coronda fue condenado este martes a otros nueve años de prisión tras admitir en un juicio abreviado el crimen de un compañero de pabellón ocurrido en mayo de este año, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Facundo Martín Fernández, quien en el juicio admitió haber asesinado a Lucas Ezequiel Amarillo, de 21 años, en una pelea ocurrida el 11 de mayo pasado en el pabellón número 7 de la cárcel de Coronda, habitaba en su mayoría por reclusos de religión evangélica.
Al momento del crimen, Fernández estaba en la última parte de una condena a cinco años por homicidio, atenuado por haber sido cometido con exceso de legítima defensa, en tanto Amarillo había sido condenado a 25 años de cárcel por homicidio.
La nueva pena a Fernández fue impuesta por el juez Luis Octavio Silva en un juicio abreviado en cuyo desarrollo también fue declarado reincidente.
El homicidio de Amarillo fue cometido alrededor de las 23 del 11 de mayo de este año en una celda del pabellón número 7, hecho que quedó registrado por las cámaras de vigilancia del penal.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) indicó que «con la intención de matar, el hombre de 22 años utilizó un arma blanca para atacar a la víctima» y precisó que «Amarillo resultó herido en el tórax y en una mano y, a causa de la agresión, falleció minutos después en un pasillo del pabellón».
Fernández reconoció su responsabilidad penal como autor de homicidio simple y el juez consideró acreditada la atribución delictiva realizada por la Fiscalía, en tanto la defensa aceptó la calificación penal del ilícito y la pena impuesta.