El juez federal Claudio Bonadio fue confirmado este viernes por la Cámara Federal de Casación al frente de la causa en la que se investigan presuntas irregularidades en la compra-venta de dólar futuro, en la que ya fue procesada la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
La decisión fue tomada por mayoría por dos de los tres jueces que conforman la Sala I de Casación, en respuesta a la presentación presentado por el director del Banco Central Pedro Biscay.
Los camaristas Gustavo Hornos y Mariano Borinsky votaron por “declarar inadmisible” el recurso de casación presentado por Biscay, mientras que la titular ese cuerpo judicial, Ana María Figueroa, opinó en dirección contraria.
“La defensa no ha logrado demostrar fundadamente que en el caso se encuentre comprometida una cuestión de índole federal como para habilitar la intervención de este tribunal”, sostuvieron los magistrados.
“El apartamiento de un magistrado del conocimiento de una causa no puede reposar en una mera sospecha de parcialidad pues las causales de recusación deben ser evaluadas con el máximo de ponderación y prudencia, desde que no puede erigirse en el medio para que varíe a gusto del recusante la radicación de la causa en desmedro de la garantía del juez natural y de la correcta administración de justicia”, remarcaron.
“Los motivos esgrimidos por la parte en su presentación no alcanzan para sustentar el pedido de recusación intentado y sólo revelan una disconformidad con las decisiones adoptadas por el magistrado interviniente en el marco de la causa que nos ocupa”, sostuvieron Hornos y Borinsky.
La titular de la Sala I de Casación, Figueroa, se diferenció al sostener que “la recusación es un instituto para atender las razones personales entre el imputado y el juez acerca de la imparcialidad del juzgador y/o el temor de parcialidad que el magistrado provoca, lo que debe analizarse en cada caso por encontrarse consagrado por la Constitución Nacional y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos”.
A través de su abogado Alejandro Rúa, Biscay había recusado a Bonadio por considerar que era parcial y tras reprocharle que un trato injusto que se plasmó en hechos como que se le impidiera acceder a fotocopias del expediente judicial.
El magistrado rechazó la recusación planteada por el director del Banco Central y, acto seguido, fue la sala II de la Cámara de Apelaciones la que confirmó el fallo de Bonadio, aunque no sin deslizarle una serie de cuestionamientos.