La Justicia de Córdoba ratificó hoy la pena de prisión perpetua para el ex basquetbolista Alejandro Bertotti, condenado por asesinar de 24 puñaladas a su esposa embarazada, Natalia Vercesi, en julio de 2009, en una casa de la ciudad de San Francisco.
En el mismo fallo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) cordobés, también quedó firme la misma condena para el coautor del crimen, Leonardo Forti. Con ello, el tribunal rechazó los planteos de las respectivas defensas de los condenados que habían apelado la sentencia que la Cámara en lo Criminal de San Francisco dictó por mayoría en 2011.
Para el TSJ, integrado por Aída Tarditti, Luis Rubio y María Cáceres, las grabaciones de imágenes de video que constan en la investigación muestran «con claridad que Bertotti ingresó en la casa» en la que convivía con su esposa «por el garaje» y «en el auto», lo que contradice la hipótesis «del robo en el que asaltantes habrían ingresado luego y que desvió en un primer momento las sospechas fuera del entorno familiar».
En el mismo sentido, la resolución destaca que «fue Bertotti quien contactó a Forti» y, «si bien éste cumplió un rol en el plan, él y no Forti tenía problemas con la víctima, conocía las condiciones que podía aprovechar en el momento del hecho (la víctima estaba sola), y dentro de la casa se encontraron todos los rastros con valor criminalístico».
El TSJ confirmó las penas impuestas por el delito de «homicidio calificado por el vínculo, alevosía y pago de precio en concurso ideal, y aborto en concurso real», aunque aclaró que a
Bertotti le correspondía el rol de autor y a Forti el de cómplice primario en vez de coautor, lo que no modifica el monto de la pena.
Según el fallo, los dos imputados «actuaron de consuno» y mientras Forti, que «había ingresado a la casa oculto en el auto» de Bertotti, «le pegó con un fierro (a Vercesi), desmayándola momentáneamente, esta ocasión luego fue aprovechada por Bertotti para emprender con una arma blanca la ejecución, sin Forti presente».
El crimen de Vercesi (27) fue cometido el 8 de julio de 2009, en la casa situada en Urquiza 94, de la ciudad cordobesa de San Francisco, donde la víctima, que estaba embarazada de 24 semanas, residía junto a Bertotti y la pequeña hija de ambos.
Tras ser detenido, Forti confesó que el ex basquetbolista le había pagado por participar del hecho, por lo que Bertotti, quien inicialmente había dado a la Policía la versión de que él y su mujer habían sido víctimas de un robo, también terminó detenido.