Dylan Cantero, el hijo más chico de Celestina Contreras y Ariel «Viejo» Cantero, fue detenido en marzo del año pasado en un control vehicular y enfrenta una causa penal por portación de arma de fuego en el fuero de Menores. Tiene 17 años y la próxima semana llegará a su mayoría de edad tras las rejas. La prisión preventiva que enfrenta ya fue prorrogada y este miércoles la Cámara Penal confirmó en parte la decisión del juez de primera instancia y solicitó que se lleve a cabo un informe socioambiental en la casa de su hermana para resolver el pedido de morigeración que hizo la defensa en un plazo de 15 días. Fijó plazo además para que la Fiscalía lo acuse en caso de considerarlo, mientras deberá realizarse un informe con un perito balístico para determinar el correcto encuadre legal del caso. En 2019, el adolescente había sido detenido por Gendarmería en un hecho similar.
El sábado 27 de marzo de 2021 por la madrugada, Dylan, entonces 16 años, fue detenido junto a otros cuatro jóvenes, dos de ellas mujeres, a bordo de un auto durante un control vehicular. En su interior, había un arma de fuego, 280 mil pesos y 700 dólares. El control los detuvo en Moreno y Khantuta, en su barrio 17 de Agosto, según contó una fuente policial.
El caso quedó en manos del fiscal Carlos Covani y notificó al Juzgado de Menores la situación de Dylan. Contra el adolescente se sigue una causa penal en el fuero penal de menores donde se dispuso que quedara en prisión preventiva.
Los defensores particulares del chico, José Alcacer y Agustín Ferrari, apelaron la medida cautelar y cuestionaron la prórroga de la prisión preventiva al considerar que es arbitraria y no tiene fundamentación suficiente.
Los letrados entendieron que corresponde la libertad o en su defecto un arresto domiciliario en la casa de una de sus hermanas que se ofreció como garante. Alcacer cuestionó la calificación penal al entender que no es una portación sino una tenencia ya que el arma y el cargador se encontraban separados. Mientras que su colega Ferrari hizo referencia a los informes de la institución carcelaria que son positivos y dan cuenta de las tareas que está realizando y los buenos vínculos que generó con sus compañeros.
La asesora de menores apoyó el pedido de la defensa y la fiscal Magdalena Mazzini se opuso, fundamentó el encuadre del hecho en el delito de portación y la posibilidad de una condena efectiva en su caso.
Tras la finalización de las exposiciones de las partes, el camarista Javier Beltramone evaluó el caso y resolvió confirmar parcialmente la decisión de primera instancia. El magistrado pidió la realización de un pormenorizado informe socioambiental en el domicilio de la hermana del adolescente y sobre una propuesta laboral de la defensa en un plazo máximo de 15 días, fecha en la que se deberá expedir sobre la posibilidad de una alternativa a la prisión preventiva. Para ello además deberán tener en cuenta los informes de la institución donde está el adolescente.
Además instó a la Fiscalía a acusar en un plazo no mayor a 30 días hábiles, tiempo en el que deberá evaluarse por un perito oficial el planteo de la defensa respecto a las condiciones inmediatas de uso del arma en cuestión.